Sin contar a los microorganismos, en el mundo hay muchos más insectos que cualquier otra cosa. Han estado en el planeta durante más de 100 millones de años y se han convertido en una parte importante de la cadena alimenticia. Sin lugar a dudas, son la forma de vida predominante en la Tierra.
Estos minúsculos voladores transmiten enfermedades como la malaria, fiebre amarilla, dengue, zika, chikungunya, y representan un gran riesgo para la salud pública mundial. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que hay 390 millones de infecciones de dengue por año, con aproximadamente la mitad de la población mundial en riesgo.
En las Américas en 2019 se reportaron más de tres millones de casos sólo de dengue, el mayor número registrado en la región hasta el momento, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Podría suponerse que si se desarrolla una tecnología que controle totalmente la reproducción de mosquitos y en cada nueva generación se genera un mayor número de machos, las especies podrían eliminarse. Sin embargo, no es lo que los científicos desean.
¿Por qué no podemos exterminar a los mosquitos?
No podríamos vivir sin mosquitos porque eliminarlos crearía una distintiva ausencia en el medio ambiente, acarreando consecuencias en la cadena alimenticia, entre otras posibles desenlaces de efecto dominó.
Otros estudios han pronosticado un destino similar para varias especies de peces en el mundo que tendrían que adaptar su dieta para sobrevivir. Este escenario resultaría particularmente difícil para predadores especializados, como en el caso del pez mosquito.
¿Por qué el 20 de agosto?
La Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres nombró el 20 de agosto Día Mundial de los Mosquitos para señalar la importancia del hallazgo del entomólogo escocés Ronald Ross sobre la relación entre la malaria y los mosquitos, en 1897.
Después de años de investigación infructuosa, Ross finalmente demostró en 1897 que los mosquitos Anopheles podían portar el parásito. Llamó el día de su descubrimiento, el 20 de agosto de 1897, Día del Mosquito.