"El Consejo de Paz y Seguridad suspende la participación de Malí en la Unión Africana hasta que se restablezca el orden constitucional y exige liberar al presidente del país, al primer ministro y a otros funcionarios retenidos por la fuerza por el Ejército", indicó el organismo.
El 18 de agosto en Malí estalló un motín en una base militar situada cerca de la capital, Bamako. Un grupo de altos cargos militares se amotinaron y detuvieron al presidente Ibrahim Boubacar Keita y a varios ministros. Horas después el mandatario anunciaba su dimisión y la disolución del Parlamento y del Gobierno.
Las tensiones políticas en el país africano se han agudizado desde la reelección de Keita como presidente del país en agosto de 2018, en unos comicios marcados por numerosas irregularidades, según la oposición.
Al presidente, de 75 años, le acusan de corrupción, incapacidad para combatir a los insurgentes yihadistas que no paran sus ataques desde 2012, y de la crisis económica agravada por la pandemia del COVID-19, en un país dependiente de la producción de oro y algodón.