"Esta presidencia que hoy comienza, será la de los cambios urgentes, pero también la de los cambios irreversibles", afirmó Abinader en su primer discurso a la nación, en el cual admitió que el país vive uno de sus momentos más difíciles por la pandemia.
Tras ser juramentado por el titular del Senado, Eduardo Estrella, el nuevo jefe de Estado lanzó una oferta al trabajo y diálogo ilimitado para salir adelante con más unidad, fuerza y esperanza, ante los múltiples desafíos y dificultades.
"Nuestro gobierno pondrá en marcha un plan nacional de detección, aislamiento, rastreo y tratamiento de contagiados a una escala sin precedentes, con el compromiso de garantizar el acceso a la vacuna contra el virus a toda la población dominicana", anunció el político del Partido Revolucionario Moderno.
"El virus está poniendo a prueba toda nuestra estructura social, con consecuencias para la salud y nuestro sistema sanitario, pero también para la actividad económica, educativa, cultural y social, por eso debemos actuar ahora y con contundencia", insistió.
Adelantó que el presupuesto de salud superará los 66.000 millones de pesos (unos 1.131 millones de dólares) para atender a la emergencia y transformar el modelo de atención sanitaria, con la aspiración de ubicarlo entre los mejores de América Latina.
"Sirva este acto de recepción de la Banda Presidencial para adquirir aquí un compromiso solemne: Nadie va a quedar desatendido ni abandonado a su suerte porque de esta crisis vamos a salir, todos y juntos", recalcó el nuevo mandatario.
El triunfo electoral de Abinader, con Raquel Peña como vicepresidenta, puso fin a 16 años de gobiernos del Partido de la Liberación Dominicana.