"Hay 15 personas que están con positivo, (…) vamos a llevarlas a un centro de recuperación y que dejen de contagiar, hoy día ya han debido contagiar a un montón de personas", dijo a reporteros el ministro de Defensa, Fernando López, al término de una reunión de varias autoridades con la presidenta transitoria Jeanine Áñez.
El titular de Defensa no precisó cómo se habían detectado los supuestos contagios entre los protagonistas de la multitudinaria marcha convocada por la Central Obrera Boliviana para rechazar el tercer aplazamiento de las elecciones generales, hasta el 18 de octubre, decidido por el Tribunal Supremo Electoral.
El reporte del ministro siguió a denuncias gubernamentales previas que advirtieron sobre un supuesto plan sindical para aprovechar la protesta para provocar un contagio masivo de COVID-19, algo que dirigentes de la marcha negaron rotundamente.
La presidenta Áñez, también en diálogo con reporteros al cabo de la reunión gubernamental, descalificó la protesta de la COB.
"Es muy irresponsable, en un tiempo en el que estamos en el mayor pico de contagio, que hagan estas marchas. Me parece irresponsable y canallesco, no tienen que pensar en la política, ahora la gente no quiere política, ni campaña, lo que quiere es tener condiciones en salud y dinero", dijo la gobernante, quien es también candidata.
Utilizó también el calificativo de "canalla" para condenar el "bloqueo" del parlamento a varios créditos contratados por el Gobierno para combatir la pandemia de COVID-19.