El pasado 20 de julio, Kim Tae-nyeon, líder de la organización política, instó a que la Casa Azul, es decir, la oficina ejecutiva y residencia oficial del presidente surcoreano, así como otras oficinas gubernamentales y la Asamblea Nacional se trasladaran de Seúl a Sejong.
Esta no es la primera vez que el partido intenta convertir Sejong en la capital del país. La ciudad, ubicada a unos 130 kilómetros al sur de Seúl, ha sido fundada hace más de una década justamente con este propósito. El objetivo de la medida era reducir la influencia y el dominio de Seúl, además de promover el desarrollo regional de otras áreas del país.
El plan de la nueva capital, propuesto durante el Gobierno de Roh Moo-hyun —quien ocupó la presidencia del país entre 2003 y 2008—, fue duramente criticado por los opositores del Gobierno, quienes llevaron el asunto al Tribunal Constitucional del país.
En octubre de 2004 se dictaminó que elplan de reubicación era inconstitucional. El Tribunal consideró que, dado que Seúl ha sido convencionalmente la capital del país desde la dinastía Joseon —que reinó de 1392 a 1910—, la reubicación de la capital debería ir precedida de una enmienda a la Constitución, detalló Korea Herald.
El partido gobernante considera que una enmienda constitucional para la reubicación de capital está fuera de cuestión, pero considera posible eludir la inconstitucionalidad del plan.
"La decisión de la Corte de que la capital del país ha sido [convencionalmente] Seúl no es permanentemente inmutable", afirmó el líder del Partido Demócrata, indicando que el fallo de 2004 podría ser revocado debido a un cambio en la percepción pública acerca de la capital en los últimos 15 años.
El Partido Futuro Unido, principal opositor de la idea, sostiene que antes de que se reanude cualquier debate sobre el tema, el partido gobernante debe primero hacer frente a la decisión del Tribunal Constitucional.