"No vemos la actividad de China en materia de misiles como una amenaza a la seguridad, y ni mucho menos, como un motivo para suspender el Tratado INF", dijo Fomín a la prensa.
Según Fomín, la retirada de EEUU del acuerdo es errónea, y las acusaciones de Washington contra Rusia son ficticias ya que "toda responsabilidad por el colapso del tratado recae enteramente en EEUU".
Comentado las recién publicadas memorias del exasesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Bolton, y sus recuerdos de las negociaciones sobre el Tratado INF, el viceministro indicó que "sus estimaciones distorsionan significativamente los acontecimientos reales".
"Con respecto a la tesis de John Bolton sobre la creciente amenaza de China, me gustaría enfatizar que esta es una distorsión banal de los hechos", señaló.
Al concluir, Fomín reiteró que la retirada de EEUU del tratado fue planeada de antemano, y las acusaciones contra Rusia de violar el acuerdo carecen de fundamento.
La Casa Blanca rompió definitivamente el pasado 2 de agosto el Tratado INF de misiles de medio y corto alcance, suscrito con la URSS en 1987.
Washington insiste en un nuevo tratado que incluya a China, algo que el país asiático ya ha rechazado en reiteradas ocasiones.
Moscú, a su vez, considera que se deben tener en cuenta los arsenales nucleares de Francia y Reino Unido, países que no participan en ningún proceso de control de armas.