"Los rumores en las redes sociales, que advierten de un peligro de radiación en Finlandia causado por un incendio en una central nuclear rusa, no corresponden a la realidad", tuiteó el organismo.
Según comunicó el periódico finlandés Iltalehti, los rumores provocaron un aumento de la demanda por yodo en farmacias del país.
La semana pasada la Organización del Tratado de Prohibición Completa de Ensayos Nucleares (Ctbto, por sus siglas inglesas), informó que sus estaciones en Suecia detectaron tres isotopos de cesio y rutenio (Cs-134, Cs-137 y Ru-103) "asociados con la fisión nuclear, a unos niveles más altos de lo habitual [pero no perjudiciales para la salud humana]".
Por su parte, este 3 de julio el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) comunicó que detectó un ligero aumento de niveles de radioisótopos en el noreste de Europa, provocado, según los datos del organismo, por un reactor nuclear en funcionamiento o en mantenimiento. El OIEA subrayó que esos niveles elevados de radiación no suponen un riesgo ni para la población ni para el medioambiente.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, preguntado por la prensa sobre esos informes, afirmó que "Rusia cuenta con un sistema de monitoreo perfecto" que "no ha detectado ninguna situación de emergencia".