El grupo liderado por el argentino Gerónimo Villanueva, astrónomo del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA, ha proyectado cómo se verían los atardeceres en Venus, Marte, Urano, Titán (uno de los satélites naturales de Saturno) y el exoplaneta Trappist-1e.
Con los datos de esta simulación, la sonda podría entender mejor qué está buscando y podría evaluar mejor la composición de la atmósfera a medida que absorbe la luz solar, analizando qué longitudes de onda se dispersan y por qué.
Los nuevos modelos forman parte del generador de espectro planetario, construido por Villanueva y sus colegas, que se utiliza para interpretar la luz que llega a nuestros telescopios y decodificarla para tratar de comprender cómo es la atmósfera en otros mundos.
Los atardeceres de Venus y Marte
Un amarillo brillante pasa a naranja, marrón y luego negro a medida que el Sol desaparece en Venus. Debido a que el planeta gira sobre su eje de manera muy lenta, para ver un atardecer hay que esperar alrededor de 116 veces el tiempo que lo hacemos en la Tierra.
Sin embargo, en Marte se cuenta con más que simulaciones. El rover Curiosity ha revelado imágenes que muestran las tardes en el planeta rojo. Los días pueden terminar con un tinte claramente azulado, ya que el polvo dispersa las longitudes de onda rojas de la luz fuera de la vista, dejando las longitudes de onda azules golpear nuestros ojos.