Una fuente de la rama espacial refirió a Sputnik que el Centro Jrúnichev firmó contrato con el Ministerio de Defensa de Rusia sobre la reanudación de la fabricación de los cohetes Rokot a partir de los misiles balísticos UR-100N UTTJ que se retiran del servicio operativo.
También dijo Varochko que el nuevo lanzador se llamará Rokot-M y tendrá el sistema de control ruso, en vez del ucraniano.
"Se tomó la decisión de seguir fabricando este cohete, pero en variante modernizada. El proyecto tendrá el nombre de Rokot-M", dijo.
De 1991 a 2019 se efectuaron 34 lanzamientos de Rokot dotados del sistema de control ucraniano desde los cosmódromos de Baikonur (Kazajistán) y Plesetsk (norte de la parte europea de Rusia), en los que se pusieron en órbita 75 aparatos espaciales.
El Centro Jrúnichev había informado en 2019 que el costo del desarrollo del Rokot-M se evaluaba en 3.400 millones de rublos (unos 50 millones de dólares), incluidos 690 millones de rublos (cerca de 10 millones de dólares) que costará el sistema de control de vuelo.
También comunicó que se planea usar hacia el año 2028 más de 40 misiles balísticos UR-100N UTTJ retirados para fabricar Rokot-M.
El primer lanzamiento del Rokot-M sin elementos ucranianos está previsto para 2022, señaló Varochko.