No todos los científicos coinciden en el asunto de si habrá o un una segunda ola del nuevo coronavirus. Los que argumentan que sí se basan en lo que ha sucedido en la historia con otras pandemias. También en la poca cantidad de infectados que aún hay en el mundo y que, por lo tanto, presentan inmunidad contra el virus.
"Es un virus nuevo por lo que no es fácil hacer proyecciones. Pero podemos pensar que vamos a tener más de una ola, quizás dos o tres. Hay hipótesis que plantean pequeñas subidas y bajadas y el peor escenario sería el de una segunda ola más grande, que podría aparecer unos siete u ocho meses después", indicó Ernesto Gozzer, médico salubrista y profesor de la Universidad Peruana Cayetano Heredia.
Añadió que este último escenario es el que ocurrió con la gripe española de 1918, cuya segunda ola fue peor que la primera, pero que podría evitarse con el aprendizaje que se ha generado en el mundo en lo que va de la pandemia.
Para que no hubiera un segundo brote de COVID-19, entre un 60 y un 70% de la población tendría que estar inmunizada, ya sea por una vacuna o por haber contraído la enfermedad. Algo que intentó alcanzar Suecia con sus escasas medidas de aislamiento aunque sin éxito, ya que se estima que sólo un 7% de su población tiene inmunidad contra el virus.
"Después de esta primera ola lo que se debe hacer es tomar las medidas para evitar que haya una ola tan grande como la que hubo en 1918. Estas comprenden una sólida y permanente vigilancia epidemiológica por conglomerados para observar si la enfermedad se está moviendo. Se deben hacer estudios de seroprevalencia con frecuencia, aislar a los casos positivos y a quienes estuvieron en contacto con ellos", concluyó Gozzer.