La decisión de Facebook de colocar etiquetas a medios públicos y el anuncio de que sus publicidades podrían ser bloqueadas en EEUU, "confirma que es una empresa que tiene una creciente labor editorial, es decir, que condiciona o determina el tipo de contenidos al que están expuestos sus usuarios", dijo a Sputnik el profesor e investigador argentino Martín Becerra, especializado en libertad de expresión, medios y TICs.
En efecto, Facebook anunció a través de un comunicado que comenzó a colocar etiquetas en los perfiles de medios de comunicación que "están total o parcialmente bajo el control editorial de su Gobierno".
De acuerdo al anuncio, las etiquetas empezarán a estar visibles en los próximos días para usuarios de todo el mundo tanto en las secciones de Transparencia de las páginas como en la Librería de Anuncios de la plataforma. Para los usuarios de EEUU, además, también se incluirá la advertencia cuando se aparezcan noticias de esos medios.
Estas etiquetas ya comenzaron a aparecer en los perfiles de medios rusos como Sputnik y RT, el de la iraní Press TV o las chinas Xinhua y CCTV.
Sin embargo pueden no alcanzar a todos los medios públicos ya que, de acuerdo a su anuncio, será la propia red social la que defina cuáles medios serán etiquetados y cuáles no.
"Si determinamos que hay protecciones suficientes para asegurar la independencia editorial no aplicaremos las etiquetas", adelanta la compañía con base en la ciudad estadounidense de San Francisco.
Así, medios igualmente estatales como la británica BBC, la alemana Deutsche Welle, la francesa AFP o Radio y Televisión Española, por ejemplo, quedarían por fuera de la medida.
Las medidas de Facebook no se limitan únicamente a las etiquetas. La empresa promete comenzar a "bloquear las publicidades de estos medios en los EEUU" en el verano boreal, como una forma de "proveer una capa extra de protección ante varios tipos de influencia extranjera en el debate público de cara a las elecciones de noviembre de 2020".
Becerra señaló que plataformas como Facebook realizan un "control editorial que hoy por hoy no está sujeto a ningún tipo de regulación, auditoría o transparencia de carácter público". De hecho, remarcó, este tipo de decisiones de la empresa responden "únicamente a sus propias reglas corporativas".
"Es una preocupación el hecho de que tomen este tipo de decisiones que son clave para la circulación de mensajes en nuestra sociedad sin ningún tipo de intervención o tratamiento de carácter público o cívico", advirtió.
Con una visión más geopolítica, Becerra enmarcó la medida de Facebook en "la desconfianza que EEUU y las grandes corporaciones con sede en EEUU tienen respecto a los países asiáticos como China o euroasiáticos como Rusia". El analista consignó que tanto en estos países, como en Irán, la existencia de medios estatales se da de forma más directa, al tiempo que "en los países capitalistas occidentales hay una influencia estatal que no se da a través de relaciones de propiedad directa".
Además, es posible que comience a verse "una doble vara en la labor de Facebook" que puede tener consideraciones diferentes con medios igualmente estatales como Xinhua o Televisión Española.
Una acción de "censura política ideológica"
"Las sociedades democráticas no pueden dejar en manos de una plataforma de redes sociales, en este caso Facebook, la protección de sus derechos de internet y de información", comentó a Sputnik María José Braga, presidenta de la Federación Nacional de Periodistas de Brasil (Fenaj).
"Facebook es una empresa privada y no tiene la prerrogativa de dictar qué es verdad y qué no es verdad o qué es o no es influyente", añadió la periodista.
Braga remarcó que la medida constituye "una censura política ideológica" que recae, precisamente, en los medios de países como China y Rusia.
Para Fabián Cardozo, presidente de la Asociación de la Prensa Uruguaya (APU), "lo que más llama la atención es que este tipo de medidas se tome con medios de Rusia e Irán y no se tome con medios estadounidenses".
En ese sentido, Cardozo afirmó que la medida "claramente busca censurar y limitar la libertad de expresión y de información porque algunas de estas agencias tienen una mirada contrahegemónica y colocan otros temas y otras miradas sobre las noticias".