"Me veo obligado a ordenar a las fuerzas del orden que evalúen las acciones de los funcionarios desde el punto de vista legal", dijo Putin en una reunión sobre la gestión del accidente, que provocó la contaminación de dos ríos.
Un representante de la empresa operadora de la central aseguró al presidente que el Ministerio de Emergencias fue notificado inmediatamente sobre el accidente.

Mientras, el ministro de Emergencias ruso, Evgueni Zínichev, declaró que la empresa lo comunicó solo dos días después.
"Durante todo este tiempo la compañía intentó gestionar las consecuencias del derrame con sus propias fuerzas", dijo el ministro.
Según la información preliminar del ministerio, el derrame de combustible seguido por un incendio se produjo el 29 de mayo debido a una fisura en un tanque.
Zínichev recomendó a Putin "declarar la emergencia de nivel federal", y el mandatario ruso lo aceptó.
Por su parte, el ministro de Recursos Naturales, Dmitri Kobílkin, sugirió involucrar también a los militares en la gestión del accidente.
La semana pasada se informó que el accidente se produjo luego de que un automóvil chocara contra un depósito de combustible diésel en la central pero el Comité de Investigación de Rusia refutó esa versión.
Según la investigación, se trata de una fuga de combustible de un tanque. El combustible se derramó en la carretera y se produjo un incendio que afectó también un automóvil que pasaba justo en aquel momento.
Una parte de las 20.000 toneladas de combustible derramado acabó en los ríos Daldikan y Ambárnaya.