¡Vuelven los autocines! La salida ideal para el distanciamiento social

Cuando todo vuelva a la normalidad, los cines tradicionales van a ser de los últimos recintos en abrir. Y aun si lo hacen, muchas personas pueden llegar a temer de estar encerrados en una sala sin ventilación con desconocidos. Por eso, los autocines se convierten en una buena opción de entretenimiento en medio de la pandemia.

"El primer autocine fue creado en Nueva Jersey, en EEUU, en 1933. Tuvo un boom en los años 40 y 50 por los baby boomers, que no tenían plata para pagarle una niñera a sus hijos ni tenían televisión en la casa, por lo que elegían el autocine para poder llevarlos a la función. A partir de los años 70 empezó a decaer por el alto costo de la tierra y por la llegada de la televisión a color. Pero resurgió con el coronavirus", contó Gastón Sztutwojner, creador de Cinergia Agency, una empresa argentina que realiza autocine desde hace 10 años.

Una vez finalizada la cuarentena general en el país, piensan instalar un autocine y autoteatro en la ciudad de Pilar, en la provincia de Buenos Aires en el que pasarán clásicos de los 80 y 90, cine nacional y cine comercial internacional de los últimos dos años. En cuanto al autoteatro, se trata de una propuesta novedosa que no se ha realizado hasta ahora en el país.

"También estamos trabajando en un autocine pagado por marcas para instalar en estacionamientos de shoppings, que sea gratuito para los espectadores dada la difícil situación económica. En este último tiempo, la cantidad de consultas con respecto a esta modalidad se multiplicó por 10", añadió Sztutwojner.

Ellos cuentan con pantallas inflables de 16 metros por 10, las más grandes en Argentina, y realizan autocine para entre 190 y 280 automóviles. Mientras que antes se utilizaban parlantes fijos para escuchar la película, ahora cada auto debe sintonizar un número de frecuencia FM y se puede regular el volumen. Por último, en lugar de proyectores de lámpara se emplea tecnología LED y láser para obtener colores más vivos en la pantalla.

"Desde la primera fila de autos hasta 140 metros se ve bien pero evitamos las películas subtituladas porque a los que están más lejos les cuesta leer el texto. Es toda una experiencia nueva para mucha gente, los que van al cine tradicional ya saben lo que se van a encontrar pero cuando van al autocine está la novedad, ese gustito a la primera vez que genera algo especial", concluyó.