Una de las estrellas más antiguas del universo se llama SMSS J160540.18–144323.1, está a unos 35.000 años luz y podría pertenecer a la segunda generación de estrellas creadas hace 13.800 millones de años.
Las primeras estrellas del universo forman la conocida como Población III, y se trata de un grupo de estrellas que nunca ha sido descubierto.
La estrella gigante roja objeto de este estudio tiene un contenido muy bajo en hierro, hasta 1,5 millones de veces menor que el del Sol, lo cual es un valor inusitadamente bajo, o, en palabras de Nordlander, "es como una gota de agua en una piscina olímpica". Esto apunta a que SMSS J160540.18–144323.1 se formó en una etapa muy temprana.
Cabe destacar que la estrella con el menor contenido de hierro descubierto previamente en la galaxia tenía 11.750 veces menos hierro que el Sol.
Estas estrellas que se formaron recogiendo en su interior materiales de la Población III guardan la clave para investigar esa misteriosa generación, según la investigación.
Una explosión de supernova puede provocar reacciones nucleares en las que los núcleos atómicos colisionan con neutrones para sintetizar elementos más pesados que el hierro (Proceso R).
En este caso no se encontró ninguno de estos elementos en la estrella, lo que podría significar que estos elementos fueron capturados por la estrella neutrónica antes de morir. Pero se escapó suficiente hierro que se incorporó a la formación de SMSS J160540.18-144323.1.