"La gran diferencia se debe a las particularidades de los patógenos que las causan", indicó Ruzhentsova, responsable de investigaciones clínicas del Instituto Central de Epidemiología.
La experta señaló que la fase de incubación de la gripe española es con frecuencia menos de 24 horas con síntomas bruscos como fiebre alta, luego aparecen dolores en la garganta y tos, entre el tercero y quinto día se desarrolla neumonía o encefalitis.
Ruzhentsova remarcó que ambas enfermedades se propagan a través de las gotículas que salen despedidas de la nariz o la boca de una persona infectada al toser o estornudar, lo que lleva al contagio de gran cantidad de gente, causan fiebre alta, dolor muscular y de la cabeza, tos y dolor de garganta.
"En aquellos años y ahora la causa de la enfermedad son las mutaciones de los virus que jamás antes enfrentó la humanidad. La falta de inmunidad en estos casos empeora las consecuencias", subrayó.
Hasta la fecha, COVID-19 ha provocado en el mundo más de 228.000 muertos y más de 3,2 millones de contagios.