El nuevo equipo podrá suprimir los dispositivos de observación de los misiles hipersónicos enemigos en la sección final de su trayectoria de vuelo. De esta manera, evitará un ataque preciso de proyectiles con cabezas buscadoras optoelectrónicas, satelitales y de radar.
Los nuevos sistemas serán empleados en la protección de importantes instalaciones militares y civiles en el país, como puestos de mando y locales de lanzamiento de las fuerzas nucleares estratégicas, así como fábricas, aeródromos y ejes de transporte, detalló Izvestia.
De acuerdo con Dmitri Kornev, columnista del portal Military Russia, los nuevos sistemas de guerra electrónica serán una forma "barata y efectiva de lidiar con aparatos aéreos y municiones hipersónicas".
"No requerirá el despliegue de una gran cantidad de radares y sistemas de defensa antimisiles, tampoco la producción de miles de sistemas de defensa antimisiles de largo alcance", consideró el experto
Kornev subrayó que defender importantes instalaciones con sistemas de guerra electrónica es mucho más conveniente que proporcionar un sistema de defensa antimisiles en todo el país. El nuevo sistema "será una adición a la defensa aérea ya existente" de Rusia.