"Libia se ha convertido en un polígono de pruebas de nuevas armas de todo tipo. Instamos a cuantos violan el embargo de armas a que dejen de hacerlo, incluidos los países que estaban sentados en la mesa de negociaciones en Berlín, los que firmaron este documento, pero siguen infringiendo el embargo", dijo.
Según Turco Williams, en Libia, en un suburbio de Trípoli, fueron detectadas, en particular, unas bombas termobáricas, así como unos explosivos destinados para los terroristas suicidas.
A juicio de la funcionaria, el embargo de armas se viola mediante los suministros por mar y por aire, también algunos grupos extremistas, procedentes de otros países traen armas.
Durante las últimas semanas se agravado la confrontación militar entre el Gobierno de Acuerdo Nacional avalado por la ONU, con sede en Trípoli, en el noroeste del país, y el Ejército Nacional Libio al mando del mariscal Jalifa Haftar, que desde hace un año intenta tomar la capital.
La conferencia internacional sobre Libia, celebrada en Berlín el 19 de enero pasado con la participación de EEUU, Rusia, Turquía, Egipto y otros países, instó a redoblar los esfuerzos para lograr un armisticio sostenible en el país y a acatar el embargo de armas. Pero los bandos en conflicto, apoyados cada cual por actores externos, siguen violando la tregua declarada el 12 de enero a iniciativa de Rusia y Turquía.