"El accidente se produjo al sur del aeródromo de la ciudad de Karagandá. Después de despegar el avión, uno de los motores se incendió", dice el comunicado.
La nota indica que "tras recibir la orden de eyectarse, los pilotos militares dirigieron el avión hacia un campo, en la dirección opuesta al núcleo poblado".
"Al asegurarse de que nada amenazaba a la población civil, la tripulación se eyectó. Los pilotos están vivos", señala el texto.
De acuerdo con los datos del ministerio kazajo, se estableció una comisión para investigar el accidente.
En la zona opera un grupo del servicio de búsqueda y rescate de la Fuerza de Defensa Aérea de Kazajistán.