Como sabemos, nuestros ancestros llegaron a Europa y Asia desde África, y en ese camino, el genoma de la especie humana se fue diversificando con material genético de otras especies, entre las que destaca la de los neandertales.
Lo que no sabíamos hasta hace poco es lo común que era entre nuestros ancestros acostarse con neandertales y otras especies. Y lo cierto es que, dado que la mayor parte de nosotros aún conservamos material genético de neandertales, casi todos tenemos mucho que agradecer a este especie: el portal Science Alert asegura que hay evidencia científica que defiende que el ADN de esa especie nos ayuda a protegernos de epidemias víricas. Algo nada despreciable en este 2020.
Tradicionalmente se había considerado que la introducción de ADN neandertal en los Homo sapiens era consecuencia de un breve y puntual contacto entre las especies, pero el estudio de Gokcumen concluye que todos los genomas antiguos que secuenciamos traerán consigo una nueva perspectiva, y eso es algo que al experto le gusta mucho.
"Estamos descubriendo estas conexiones, lo cual es muy emocionante. La historia no es tan clara como lo era antes (...). Cada nuevo genoma que es secuenciado en el futuro puede cambiar completamente la historia de nuevo", afirma el especialista.
En general, los datos recabados por Gokcumen y su equipo indican que nuestros ancestros más lejanos, en todo el territorio que va de Europa Occidental a Asia Oriental, se mezclaron con diferentes razas de neandertales de manera continuada. "Mi imagen mental, ahora, es que tenemos toda una población arcaica homínida en Europa, en Asia, En Siberia, en África", explica el experto.