La psicología entre el virus y el estrés: cómo ayudarse a sí mismo y a otros

Qué no nos mata...

No cabe estar nervioso al menos porque, según los expertos, un grave estrés psicológico suele tener consecuencias fisiológicas. Esto puede provocar varias enfermedades psicosomáticas no vinculadas con la infección.

Los expertos exhortan a ver la situación desde otro ángulo, cambiar de estado de ánimo sin intentar desestimar el problema. Existe un fenómeno denominado 'estrés positivo' que da fuerzas para superar los obstáculos e impulsa a producir cambios, aunque puede tener las mismas consecuencias fisiológicas que el estrés negativo.

"Las situaciones de crisis nos obligan a pensar de forma más madura dando por hecho la incertidumbre y los problemas constantes", explica la profesora titular de la MGPPU, Marina Rozenova.

Según los expertos, con tal postura psicológica dejamos de percibir automáticamente situaciones negativas y  excesos de preocupación si no los evaluamos sensatamente tras un análisis meticuloso, lo que aumenta considerablemente las posibilidades de evitar la mala suerte.

Estamos juntos de nuevo

Las vacaciones obligatorias de los niños y el trabajo a distancia de los padres puede no solo ser un magnífico suplemento a las vacaciones en familia sino resultar una prueba complicada para todos.

Según los psicólogos, pasando la cuarentena en familia lo más importante es mantener el estado de vida normal como lo conocen los niños. La responsabilidad y el cuidado no es una carga sino un recurso energético y uno de los medios más eficaces contra el miedo.

"Si los niños están en casa solos sería mejor planear de antemano el día junto con ellos alternando estudios con entretenimientos. Tratar de estar en contacto con ellos para que no se sientan solos o preocupados cuando leen la información publicada en internet", señala la profesora de la MGPPU, psicoterapeuta Nina Chuprakova.

Si se siente 'encerrado' en casa, los expertos recomiendan percibirlo como la oportunidad de ocuparse de lo que tuvo que aplazar desde hace mucho: cambiar muebles de sitio, leer un libro, organizar un torneo de ajedrez en familia, ver fotografías y vídeos familiares, pruébese en el arte o la poesía, prepare un plato complicado.

La oficina en casa

Según los psicólogos, el período de adaptación de los empleados a las nuevas condiciones puede continuar de 1,5 a 3 meses. Un correcto análisis psicológico de la situación permitirá evitar la preocupación y el sentido de la culpa que afectan la autoestima profesional y personal incrementando rápidamente el grado de estrés.

Según los expertos, un gerente debe, ante todo, manifestar la paciencia y una actitud eficaz. Es importante evitar la manifestación de emociones excesivas vinculadas a un reforzamiento del control. Tal actitud conllevará más rápidamente a que los empleados pierdan la motivación y dejen de trabajar con el mismo ritmo.

Es necesario tener en cuenta también lo específico de las nuevas formas de interacción. Según los psicólogos, cualquier contacto indirecto durante la jornada laboral —ya sea correspondencia intensa, audio o videoconferencias— son una prueba más complicada para el sistema nervioso y psíquico que una comunicación habitual en la oficina, es decir, conlleva un cansancio más rápido y la formación de una motivación negativa.

Si las acciones de la administración son psicológicamente oportunas, según los expertos, el cambio del formato del proceso laboral no solo puede pasar con pérdidas mínimas sino que impulsará la aparición de nuevas ideas creativas.

Higiene de espíritu

Es necesario recibir información fidedigna durante el período de la pandemia, especialmente para los que deben controlarlo todo. Al contrario, es necesario dosificar el acceso a la información de personas propensas a sentir preocupación y recelo.

Según los expertos, debido a ciertos rasgos personales, algunas personas necesitan sentir una preocupación constantemente que se mantiene con frecuencia por pensamientos y pronósticos negativos. Las situaciones de crisis pueden conllevar a que se sientan como líderes.

Si uno de sus familiares se encuentra en tal situación, trate de centrar su atención en una actividad constructiva, aconséjele ocuparse de algo que le obligue a sentirse importante fuera de la situación alarmante.

"Como se sabe, la tranquilidad y el buen humor tiene un importante efecto preventivo. Las emociones positivas son capaces de proteger el organismo de enfermedades y las negativas suelen debilitarlo. Al armarse de técnicas probadas de control de estrés y autosugestión, cabe mirar hacia el futuro con optimismo", señala el empleado de la MGPPU, Alexandr Sechko.