"Rusia jamás pretendió desplomar los precios de petróleo, es una iniciativa exclusiva de nuestros socios árabes", dijo a la cadena Rossiya 1.
Beloúsov reiteró que durante las negociaciones de los países integrantes del pacto OPEP+, Rusia buscó preservar el acuerdo "por lo menos por un trimestre, con la posible prolongación por un año".
"Los socios árabes actuaron de otra manera", constató.
Mientras la OPEP buscaba una mayor reducción petrolera para mitigar el impacto del brote del coronavirus, Rusia y otros productores independientes abogaban por mantener sin cambios los recortes acordados antes.
Según algunos medios, Arabia Saudí busca expulsar el petróleo ruso de los principales mercados al ofrecer el suyo a un precio más bajo. Al mismo tiempo, el reino anunció un aumento de las exportaciones de petróleo desde abril en 12,3 millones de barriles diarios desde sus reservas, que es 300.000 barriles diarios más que su capacidad de producción.
El pacto OPEP+ sigue vigente hasta el 31 de marzo, pero debido a la reducción de la demanda de petróleo, provocada por la pandemia del SARS-CoV-2 que ha causado hasta la fecha más de 307.000 contagios, el precio del crudo de la marca Brent cayó en un mes de los 59,3 dólares por barril registrados el 20 de febrero a los 27,3 dólares por barril registrados el 20 de marzo.