"Tildar al modelo económico cubano de ineficiente es un absurdo, y tenemos que decir que más que ineficiente, es un modelo que ha demostrado su capacidad de imponerse a las restricciones [de EEUU] y que nos permitirá, cualesquiera que sean las medidas que imponga el Gobierno norteamericano, continuar nuestro propio camino", expresó Gil a la televisora rusa RT.
El alto funcionario cubano, quien también es ministro de Economía y Planificación, subrayó que muchas veces se emiten juicios respecto a la eficacia de la economía cubana, después de hacer comparaciones con la evolución y desempeño de otros modelos económicos en el mundo, sin tener en cuenta que Cuba opera en condiciones muy diferentes.
Explicó que muchos de los planes en Cuba tienen un sustento de beneficio social y se invierte mucho dinero en servicios gratuitos para la población —educación, salud, asistencia social—, que forman parte del modelo cubano.
Asimismo, subrayó que la isla está en capacidad de identificar oportunidades según su modelo económico, y es una gran ventaja para implementar medidas que no tengan los mismos resultados de lo que dicen "los libros", poniendo como ejemplo el incremento salarial aplicado a mediados del año 2019, que teóricamente podía generar un proceso inflacionario, pero no sucedió, como pasa en las economías de mercado.
Consecuencias del bloqueo
Respecto a las consecuencias del recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero que Estados Unidos impone a Cuba desde 1962, el viceprimer ministro cubano aseguró que el año 2019 "demostró la capacidad que tiene nuestra economía no solo de resistir en cualquier condición en que estemos, e incluso de no renunciar a continuar desarrollándonos".
"Es una gran mentira que el bloqueo [de EEUU] no daña al pueblo cubano, que solo daña al Gobierno, y que la causa fundamental de que nuestra economía tenga carencias y restricciones para la calidad de vida del pueblo está en nuestra ineficiencia y nada tiene que ver con el bloqueo".
A su vez, enumeró los esfuerzos de EEUU por impedir que lleguen a Cuba barcos con combustibles, las penalizaciones a bancos que hacen operaciones financieras con la isla, las prohibiciones a la entrada de turistas y cruceros, amenazas a proveedores, entre otras acciones que afectan la vida diaria de los cubanos.
De cara al futuro, el ministro cubano de Economía aseguró que se trabaja por potenciar la empresa estatal, identificar e eliminar trabas burocráticas, y generar un marco de planificación más flexible.
También se busca utilizar más eficientemente la industria nacional para lograr la disminución de importaciones, el vínculo empresarial con las universidades, y complementar a todos los actores económicos, incluso al sector privado.
Según cifras oficiales, en casi seis décadas de aplicación del bloqueo económico, comercial y financiero de EEUU contra Cuba, se provocaron perjuicios cuantificables por más de 922.630 millones de dólares, y solo de abril de 2018 a marzo de 2019 las pérdidas fueron valuadas en más de 4.343 millones de dólares.
