El Gobierno español está trabajando en la reforma del Código Penal con la introducción de un subtipo de sedición agravada de caudales públicos. De este modo, se favorecerá a los condenados por el procés catalán reduciendo las penas de prisión e inhabilitación.
Según confirma el diario EL MUNDO, a través de esta modificación legal se podrán conseguir dos objetivos; por un lado, una rebaja considerable de las condenas impuestas por el Alto Tribunal y, por otro, sortear el obstáculo que supone que las penas más altas sean por sedición en concurso medial con malversación. "Dicho en otras palabras, así se evita que, si hubiera una rebaja considerable de las penas por sedición, la malversación —en este caso una malversación agravada— pasara a ser el delito principal de cara a la inhabilitación para cargo público", explica el diario español.
Recientemente los centros penitenciarios de Lledoners (Barcelona) y Puig de les Basses (Girona) donde se encuentran cumpliendo prisión algunos exconsellers como Joaquim Forn y Dolors Bassa, acordaron aplicar el artículo 100.2 del reglamento penitenciario para permitirles salir de prisión con el objetivo de ir a trabajar y cuidar de familiares en edad avanzada.