El Juzgado de lo Penal Nº4 de Pamplona (Navarra) ha emitido una sentencia condenatoria con pena de dos años y un día de prisión contra el joven A.Q.S., por considerarlo autor de los delitos de revelación de secretos y daños a la integridad moral. Asimismo, el juez inhabilita su derecho al sufragio pasivo durante el tiempo de la condena, así como al pago de las costas procesales y una indemnización a la denunciante de 6.000 euros. La sentencia no es firme y cabe todavía interponer un recurso de apelación ante el citado juzgado.
Los hechos se remontan a diciembre de 2017, cuando el condenado publicó en Twitter una fotografía de la víctima de la violación en Pamplona de la tristemente célebre banda 'La Manada'. De resultas, familiares y conocidos de la víctima pudieron contrastar su identidad y enterarse de que se trataba de la misma joven que había sido violada grupalmente por 'La Manada' durante el transcurso de las fiestas de San Fermín en Pamplona, en julio de 2016. El caso cobró en España una notoriedad mediática aplastante y sacudió a la opinión pública. Los cinco integrantes del grupo, la infame 'Manada' fueron condenados a 15 años de prisión luego de que el Tribunal Supremo de España revisara las penas inicialmente impuestas.
El condenado, residente en la ciudad de Valladolid y sin antecedentes penales previos, publicó en su perfil abierto de Twitter una fotografía que mostraba el rostro de la víctima mientras estaba siendo violada por uno de los integrantes de 'La Manada'. Y, peor aún, escribió el siguiente texto: "La chica supuestamente violada por #LaManada ha pedido que no se difunda esta imagen porque quizá pensemos que solo era una golfa borracha. Pero cómo íbamos a pensar eso, si se la ve super forzada a lamerle el ojete a uno de ellos".
El execrable comentario generó 64 comentarios, 13 'likes' y fue compartido hasta 16 veces hasta las 17:25 horas del 7 de diciembre de 2017. Dado que durante ese espacio de tiempo la cuenta del condenado se hallaba abierta, cualquier persona pudo acceder a su contenido. El hecho reviste aún mayor gravedad si cabe por cuanto la imagen procedía del sumario judicial, aunque el juez no ha podido determinar cómo la obtuvo.
El fallo resalta que la denunciante "se vio ridiculizada y avergonzada, y ha sufrido temor de poder ser identificada por terceras personas como la víctima que sufrió la agresión sexual durante las fiestas de San Fermín en 2016 por el grupo conocido como La Manada, lo que ha obligado a la denunciante a abandonar sus estudios universitarios, e incluso a marcharse durante una temporada a vivir al extranjero".
