"Alemania reafirma su compromiso con Bolivia en el proyecto del litio, y mantiene su palabra. ¿Y Bolivia? Detener el proyecto representaría un duro revés para nuestras relaciones económicas bilaterales", publicó Duppel en su cuenta de la red social Twitter.
#Alemania reafirma su compromiso con #Bolivia en el proyecto del #litio, y mantiene su palabra. ¿Y Bolivia? Detener el proyecto representaría un duro revés para nuestras relaciones económicas bilaterales y para la credibilidad internacional de Bolivia como un lugar de inversión.
— s.duppel@AlemaniaBOL (@AlemaniaBOL) January 22, 2020
La inusualmente directa advertencia fue hecha al día siguiente de que un funcionario de alto cargo del gobierno transitorio de Jeanine Áñez revelara la intención boliviana de lograr una anulación "amigable" del contrato del Estado con ACI para un ambicioso proyecto que culminaría en la fabricación de baterías de ion litio.
El 22 de enero, el viceministro de Altas Tecnologías, Luis Ferrufino, dijo que el Gobierno de Áñez, sucesor de la larga administración de Evo Morales tras la crisis de octubre y noviembre, estaba en vías de anular el acuerdo con ACI y definir una nueva política del litio, depositado principalmente en salares altiplánicos.
El grupo ACI —conocido también en Bolivia como ACISA— fue elegido como primer socio estratégico de la estatal boliviana YLB para el desarrollo de un complejo industrial que culminaría con la fabricación de baterías de ion litio destinadas principalmente al mercado automotor alemán.
El comité cívico de Potosí, departamento sureño en el que se encuentra el salar de Uyuni, el mayor depositario de litio del país, encabezó en 2019 una serie de protestas que terminaron forzando al Gobierno de Morales, a pocos días de su caída, a anular la sociedad YLB-ACISA, pero sin tomar una medida semejante con el acuerdo original.
La administración de Áñez no ha hecho anuncios sobre los acuerdos sobre litio firmados también por el Gobierno de Morales con las firmas chinas Xinjiang Tbea Group y Boacheng para invertir hasta 2.400 millones de dólares en la explotación de otros dos salares altiplánicos, Coipasa y Pastos Grandes, incluida una fábrica conjunta de baterías de ion litio en el gigante asiático.
Solo en el salar de Uyuni, un estudio de una consultora estadounidense concluido hace dos años estableció que habría una reserva de al menos 21 millones de toneladas de litio, más de la mitad de las reservas mundiales conocidas de ese metal.