"Los medios de Alemania representan los esfuerzos de Merkel en Libia como un intento de 'evitar un nuevo triunfo de Rusia'. Merkel quiere dar a Berlín y a la UE un nuevo peso en África del Norte y Oriente Medio, pero es poco probable que dude de que Moscú desempeñe un papel clave en el proceso libio y que ya lo está haciendo", escribió Pushkov en su cuenta de Twitter.
También fueron invitados al foro los líderes rivales de Libia —el jefe del Gobierno de Acuerdo Nacional, Fayez Sarraj, y el comandante del Ejército Nacional Libio, mariscal Jalifa Haftar— y varios organismos internacionales, como la ONU, la Unión Europea, la Unión Africana y la Liga Árabe.
El ministro de Exteriores ruso en funciones, Serguéi Lavrov, afirmó tras el foro que Rusia insistió en que Sarraj y Haftar recibieran invitación a la conferencia en Berlín.
Asimismo explicó que Rusia participó en los preparativos para la reunión en la capital alemana desde el principio y asistió a las cinco reuniones preparatorias.
Actualmente en el país hay una dualidad de poderes: el Gobierno interino junto con el Parlamento en Tobruk, que controla la parte oriental y cuenta con el apoyo del Ejército Nacional Libio, y el Gobierno de Acuerdo Nacional avalado por la ONU, con sede en Trípoli, en el noroeste del país.