El actual procedimiento para realizar transacciones de comercio exterior a través del SWIFT preocupa a muchos: dado que el SWIFT está controlado por Estados Unidos, el sistema puede ser utilizado como herramienta de presión política.
China no tenía prisa con la desdolarización ni la transición a sistemas de pago alternativos. Sin embargo, el conflicto comercial con Estados Unidos ha demostrado que es muy arriesgado depender de la infraestructura financiera estadounidense, comentó a Sputnik Natalia Staprán, directora del departamento de cooperación económica multilateral del Ministerio de Desarrollo Económico de Rusia.
"Los pagos en moneda nacional son una herramienta para superar las restricciones de las sanciones. En cuanto los chinos sintieron en su propio pellejo que esto podía afectarles como obstáculo para las transacciones, ya no piensan en el volumen de negocio, sino que expresan un gran interés al respecto".
Sin embargo, el sistema de pagos propio CIPS apareció en China ya en 2015. Ahora son más de 20 bancos locales y extranjeros que están conectados a este sistema. Permite realizar pagos transfronterizos directos en yuanes. Rusia tiene una solución similar: sistema de transferencia de mensajes financieros. Además, la India está trabajando en un sistema similar.
Dejen paso al rublo y al yuan: China y Rusia se preparan por si les sacan del SWIFT https://t.co/LRMDlA6qJr
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 28 февраля 2018 г.
Dado que los países del BRICS ya tienen experiencia en desarrollar sus propios sistemas de pago, en la última cumbre de Brasilia se propuso unir esfuerzos y crear un mecanismo común y alternativo para los pagos mutuos.
Lo importante es que haya interés por parte de los participantes de las operaciones, comentó a la agencia Andréi Bokariov, director del Departamento de Relaciones Financieras Internacionales del Ministerio de Finanzas de Rusia.
"En primer lugar, son los bancos y las empresas de nuestros países. Debe haber una clara demanda e interés en crear tales sistemas. De lo contrario, el mecanismo no tendrá suficiente demanda", señaló.
Según el funcionario, ahora los países están buscando mecanismos mutuamente aceptables para todos los estados miembros del grupo BRICS.
La demanda de estos sistemas por parte de los participantes del mercado dependerá de la comodidad del uso de un sistema alternativo al SWIFT. No basta con aumentar el volumen de operaciones, sino que también hay que utilizar una interfaz cómoda.
En otoño se informó que Rusia y China pueden conectar dos sistemas nacionales propios para realizar pagos mutuos sin necesidad de recurrir al SWIFT. De esta manera, ambos lados trabajarán en una plataforma conveniente sin ninguna dificultad. Al mismo tiempo, nada impide ajustar el sistema para otros miembros del BRICS.