"Estos meses el Gobierno ha sido un enemigo tan grande y asesino, que los hinchas de distintos equipos se unieron por necesidad más que nada", afirma a Sputnik el hincha Andrés, de la barra del equipo de la Universidad de Chile.
Los de Abajo de Universidad de Chile, La Garra Blanca de Colo Colo y Los Cruzados de la Universidad Católica, las barras de los tres equipos más importantes del fútbol chileno, han compartido los lugares más icónicos de las protestas sociales, sumándose a los petitorios que la sociedad civil demanda a gritos.

Se les ve marchando y manifestándose juntos de manera muy natural y sin los choques violentos de los que fueron protagonistas durante mucho tiempo. Una imagen que ha llamado poderosamente la atención en estas manifestaciones.
"Creo que hace tiempo que existía la inquietud de varios sectores de las barras por dejar de pelear de forma tan brutal entre las hinchadas. Está muy bueno porque las barras bravas ahora van a tener otro sentido, más comprometido con el pueblo", agrega Andrés.
Alexis Polo, de la barra de Los Cruzados, coincide. "Hay un lienzo muy bonito que dice: 'perdimos mucho tiempo peleando entre nosotros', y es real", evalúa en diálogo con Sputnik. "Hemos entendido en general que esta lucha es mucho más importante que una lucha entre equipos de fútbol que al final no nos genera nada", agrega.

"Ahora realmente estamos peleando por lo importante, entendiendo que el enemigo común es el Estado, la política criminal, el modelo económico, y no entendiendo como el rival al de un equipo distinto", completa Polo.
"En segundo lugar por un trabajo político que se venido realizando en el futbol de manera silenciosa, interesante y astuta para combatir los sesgos que habían ahí políticamente, porque el barrismo en Chile estuvo plagado de fuerza de ultraderecha y ese escenario comenzó a revertirse gracias al barrismo social, barrismo del que somos herederos como barristas antifascistas", agrega Alfredo.
Las barras bravas de Chile: de la cancha a la calle

La estatua del general Manuel Baquedano a caballo, que está ubicada en el centro de la Plaza de la Dignidad, se ha transformado en un verdadero símbolo de encuentro de las hinchadas populares, las que decidieron movilizarse junto al resto del pueblo chileno desde el primer día de protesta.
"Nuestra condición de colocolinos los que nos lega principalmente es estar permanentemente con el pueblo, el tener una gran complicidad con la gente que se moviliza y con el bajo fondo. Nosotros somos del bajo fondo, Colo Colo es un equipo de la clase popular. Colo Colo pertenece a las franjas más explotadas y más marginadas de la sociedad y por tanto comparte una gran conexión con esto, con el bajo fondo, con los sujetos populares. Por eso, como colocolinos, como parte de la Garra Blanca, como antifascistas decidimos plegarnos no solo al 18 de octubre sino al proceso de movilización en general", detalla Alfredo.

"Como en este estallido fue todo el pueblo el que salió a la calle, el apañe de la barra fue como obvio, además de que ya se venían apañando otras causas desde la barra, sobre todo del lado antifascista de Los de Abajo".
En el caso de la barra del equipo de la Universidad Católica, Alexis Polo explica que coexisten en el plantel grupos de "hinchas antifascistas" y "chiquillas feministas" que han generado una síntesis política interesante, y que son los que se suman a la movilización y van a las marchas, "puedes ver muchos lienzos de la Católica con la cara del Che Guevara, de Víctor Jara de la Gladys Marín —ex dirigente comunista— reivindicando la figura de ellos como personajes políticos, y las ideas que ellos expresan".
Las protestas siguen en Chile

Cánticos, fuegos artificiales, bombos y lienzos, los llamados "elementos de animación" han rodeado la Plaza de Dignidad, lugar donde la sociabilidad y la lucha de las hinchadas, que sigue día a día en la calle, y en particular los días viernes justamente en este emblemático lugar de protesta en Santiago.
"Hay una convicción que en Plaza Dignidad resguarda un gran valor histórico del pueblo movilizado en Chile. Ese valor simbólico tiene que ver con sostener una movilización, con que en el metro Baquedano, por ejemplo, se torturaron personas, con que ese espacio se recuperó para la movilización. Que ha sido el lugar de las mayores alegrías que ha habido de Chile, las alegrías del futbol se celebraron ahí, la muerte del tirano Pinochet, el retorno a la democracia también se celebró ahí, la copa Libertadores de Colo Colo. Es un lugar que resguarda una gran carga emocional para el pueblo colocolino y chileno. Cuando el 31 de diciembre esta plaza amanece sitiada por más de 1500 carabineros la convicción es ir a defenderlo como un lugar propio", explica Alfredo.

"Nos mantiene en la protesta la misma razón que a toda la gente, la de vivir sufriendo y ver a toda la gente que conocemos sufriendo por el sistema injusto. Las deudas, la salud asquerosa, todo eso. Solo que nosotros estamos más organizados que la mayoría y podemos llevar fuegos artificiales y otras cosas para prender la protesta, además de que muchos no tenemos trabajos muy estables por lo mismo de estar siempre viajando para ver a la U, así que podemos más ir a protestar", relata Andrés de la Universidad de Chile.
El campeonato nacional de fútbol en Chile
La participación de los hinchas en el estallido social también involucró al resto del mundo del fútbol. En las primeras semanas de la crisis social varias barras de equipos de Primera División y de Primera B se manifestaron en redes sociales mostrándose en contra del regreso del campeonato para no "distraer" a la gente de las demandas sociales. Varias figuras de los equipos del balón pie se sumaron a las demandas y llamaron a realizar cabildos abiertos para debatir sobre la situación que vive el país sudamericano. Finalmente, la Asociación de fútbol de Chile decidió el 29 de noviembre suspender el campeonato 2019.
Mi respeto eterno por Ignacio Saavedra. 20 años y con una posición clara y fundamentada de lo que sucede. Me recuerda a Raimundo Tupper, quién en 1988, con 19 años, se la jugó abiertamente por la opción del "No". En un club como Universidad Católica... pic.twitter.com/QRVL1JdnF7
— Andrés Vial Besa (@andres_vial) December 2, 2019
En estos últimos meses del 2019 la visión de la gente movilizada ha cambiado respecto a las barras del fútbol, dejándolos de ver como cuasi delincuentes o alienados. Hay una valoración distinta sobre el hincha, al encontrar en este personaje a un aliado en la acción de protesta, con sus cánticos y pirotecnia, así también como una defensa frente a la represión, pues muchos barristas han formado parte de la hoy llamada "primera línea" que ha permitido mantener contenidas a las fuerzas represivas permitiendo la manifestación pacífica del resto.
"Nosotros somos parte del proceso de movilización, somos parte de un conjunto de actores políticos que vienen empujando una insurgencia contra la sociedad neoliberal, contra el neoliberalismo y el fascismo, por eso decidimos plegarnos a esta movilización y formar pare de ella", concluye Alfredo.