La investigación realizada por científicos de la Universidad de Lancaster demuestra que los bloques de LEGO proporcionan un aislamiento térmico a igual nivel e incluso mejor que materiales mucho más costosos, como el vidrio Macor o el plástico Vespel, que se utilizan hoy en día en la industria criogénica.
"Creemos que la conductividad térmica extremadamente baja de la estructura se puede atribuir a la conexión sólida de alta resistencia entre los bloques", concluye el informe, publicado en la revista Scientific Reports.
Como parte del experimento, los científicos británicos colocaron por nueve días un simple muro compuesto de cuatro barritas y una figurita LEGO en el refrigerador y bajaron la temperatura hasta los 0,004 Kelvins (-269.15 °С).
Los investigadores creen que en el futuro sería rentable imprimir ese tipo de material en las impresoras 3D.
"En el mercado actual, el precio de una sola hoja de Vespel de tamaño de 100 cm2 cubriría el costo de toda la configuración de la impresora 3D necesaria para crear las estructuras ABS, que podrían usarse repetidamente", aseguran en el estudio.
¿Por qué es un hallazgo importante?
Actualmente, la ciencia ha avanzado hasta crear diferentes tipos de refrigeradores, que utilizando los principios químicos pueden enfriar la materia hasta una temperatura que se acerca al cero absoluto (–273,15 °С).
Este proceso se acompaña de la transferencia de energía de una capa a otra, que se puede usar para enfriar la materia a temperaturas aún más bajas, haciendo que los átomos de helio-3 circulen constantemente entre diferentes capas.
Sin embargo, como explica el director del proyecto, Dmitry Zmeev, dicho procedimiento tiene cierto límite debido a las propiedades del helio que al acercarse al cero absoluto transfiere más calor y pierde su eficiencia.
Los últimos pueden convertirse en una revolución en la computación cuántica. Uno de los obstáculos para la elaboración de este tipo de ordenadores es el hecho de que los procesadores cuánticos necesitan entornos con temperaturas extremadamente bajas para operar, un estado que es difícil de alcanzar.