Entre las 3:03 y las 3:54 de la madrugada del 20 de diciembre de 1989, el entonces presidente de EEUU, George H.W. Bush, hizo tres llamadas telefónicas a presidentes latinoamericanos. Primero sonó el teléfono del mexicano Carlos Salinas, luego el del venezolano Carlos Andrés Pérez y por último el del argentino Carlos Menem.
Las transcripciones de aquellas conversaciones son solo algunos de los documentos revelados por el proyecto 'Panamá Files', una iniciativa del colectivo de periodistas 'Concolón' que busca procesar y difundir una serie de información clasificada producida por EEUU sobre la invasión a Panamá que se inició el 20 de diciembre de 1989.
En diálogo con Sputnik, la directora del proyecto, Sol Lauria, explicó que la iniciativa nació a raíz de la constatación de que en Panamá no abundaban trabajos periodísticos, académicos o incluso artísticos sobre lo que sucedió el día en que las fuerzas armadas de Estados Unidos invadieron Ciudad de Panamá. Lo que sí había, sostuvo, era "una narrativa construida por EEUU y una élite panameña en torno a que la invasión fue una 'liberación'".
George H. W. Bush quiere que los gobiernos de la región reconozcan al nuevo presidente de Panamá: Guillermo Endara. Durante la madrugada, habló con los de México, Venezuela y Argentina. Ahora sigue las reacciones. Doc desclasificado en #PanamáFiles ➡️⬇️https://t.co/0n8GYetQVD pic.twitter.com/uMTDtp0XcZ
— Concolón Panamá (@ConcolonPanama) December 20, 2019
"Se veía a la invasión como el fin de una etapa nefasta" dijo la periodista en referencia a un discurso que resaltaba el retorno a la democracia tras la dictadura de Manuel Antonio Noriega (1983-1989) y que fue apuntalado con un "control férreo de los medios de comunicación" panameños.
El colectivo de periodistas pronto comprendió que muchas de las verdades ocultas sobre la invasión podían encontrarse en una serie de documentos que habían sido desclasificados por Estados Unidos y que ya estaban disponibles en internet. Para acceder a otros documentos que aún no estaban disponibles, los periodistas iniciaron contactos con organizaciones como el Centro de Derechos Humanos de la Universidad de Washington, con quien coordinaron pedidos de acceso a información pública y búsquedas en las cajas del Archivo Nacional de EEUU.
Entre los documentos aparecen decenas de conversaciones de Bush con Guillermo Endara, a quien EEUU buscaba consolidar como nuevo presidente tras la invasión. La cercanía entre ambos queda de manifiesto en los reportes de sus llamadas, en una de las cuales Endara le comunica a Bush que "el pueblo panameño está muy agradecido" y que ganaría cualquier elección a la que se presentara en Panamá.
En 'Panamá Files' también aparecen publicados una infinidad de reportes sobre la marcha de la operación militar en Ciudad de Panamá. El primer reporte sobre la operación advierte que el entonces líder de la Unión Soviética Mijaíl Gorbachov ya había tomado conocimiento de la situación y que, para Moscú, la acción violaba la carta fundacional de Naciones Unidas.
"Llama la atención la obsesión de Estados Unidos por generar información y registrar todo. Es asombrosa la cantidad de documentos y suponemos que hay muchos más", enfatizó Lauria.
Según la periodista, la gran cantidad de documentación sobre la intervención en Panamá se explica por la necesidad de EEUU de asegurar un relato victorioso tras el duro golpe para el "ego norteamericano" que había significado la derrota en la Guerra de Vietnam.
Lauria remarcó que los documentos muestran cómo EEUU se procupó por "construir un relato para convencer a vencedores y vencidos, tanto a su propia tropa como a los panameños, sobre la magnífica hazaña de la invasión y esta idea de liberación".
Un discurso que se convierte en certeza
Para la directora del proyecto, la clave de los documentos divulgados por 'Panamá Files' es que consiguen "resquebrajar" el discurso de la liberación y aporta un sustento documental a los reclamos históricos de las víctimas, que "estuvieron muchos años en soledad total y bajo la indiferencia estatal".
"Finalmente hay una certeza de la idea que se tenía sobre cómo EEUU maquinó la invasión y las operaciones psicológicas que hicieron antes y durante la intervención para construir la ida de liberación", sostuvo.
En ese sentido, señaló cómo lo que hasta ahora eran "discursos marginales y clandestinos" dentro de Panamá, ahora se convierten en verdades "irrefutables" al haber quedado plasmadas en documentos "que tienen el sello de la Casa Blanca".
Por ejemplo, uno de los documentos divulgados por el colectivo, y fechado en abril de 1991, consigna que 17 soldados estadounidenses fueron condenados en tribunales marciales de su país por haber cometido crímenes contra civiles durante la invasión. "Ellos mismos admitieron el asesinato de civiles", señaló Lauria, confiando en que ese tipo de información pueda probar los abusos denunciados internacionalmente por las víctimas panameñas de la invasión.