La invasión de Panamá o por qué el ratón Mickey "es malo"
Este viernes 20 de diciembre será duelo nacional en Panamá por primera vez en 30 años. Sin embargo, será una jornada de trabajo normal, algo que las organizaciones sociales cuestionaron porque entienden que si no se para el país, es difícil hacer un duelo y reflexionar colectivamente sobre lo que pasó.

"Se vende mucho la idea desde EEUU hacia el mundo y más hacia América Latina de democracia perfecta, que todo es perfecto, y al final ese sueño americano es muy edulcorado. Es mucho más falso de lo que la gente piensa", afirmó Belda. "Entonces ese simbolismo de reinterpretar o burlarnos de Mickey Mouse es como parte de esa idea imperialista de dominación", agregó.
Para el artista "ese simbolismo que se crea a través de los murales es un debate con toda la información que se maneja desde otros medios, como la tele, la radio, el cine". "Los niños pasan y dice ah, ese Mickey Mouse es malo, reconocen la reinterpretación", expresó.
Mensajes en las paredes









Belda cuenta que poco tiempo después de transcurrida la invasión —que se extendió desde el 29 de diciembre de 1989 al 31 de enero de 1990— el arte sirvió para canalizar el trauma social y lo hizo mediante distintas disciplinas: cine, literatura, teatro.
"Pero eso ha ido disminuyendo con el tiempo. Ahora ha vuelto en el cine, que se ha vuelto el lugar donde más personas están intentando hablar directamente del tema o mencionarlo o hacerlo parte de la trama de a película", apuntó. Para completar la idea, dijo que actualmente "hay muy poca producción específicamente sobre la invasión si sacamos solo el cine".
Volviendo a sus últimas pintadas en El Chorrillo, y a los turistas que se sorprendieron con "el Mickey maléfico", Belda repitió la respuesta que les dio cuando le preguntaron por qué hacía el mural.
"El arte va a cambiar el mundo, es la herramienta más poderosa que tiene la población para expresarse, hacer catarsis, hablar de su realidad y sobre todo para contar su propia historia, porque estamos muy dominado por otros medios, por otra formas de comunicar que nos hacen mucho daño", señaló.
"Para una buena parte del pueblo fue un hecho muy trágico, que le ha costado muchos años poder hablar del tema, soltarse, hacer catarsis. Y para una pequeña parte de la población muy ligada al Gobierno de EEUU la idea de país genuflexo le pareció una liberación", manifestó.
Por eso Belda cree que una hipótesis es que "hay muchas personas vivas que participaron de ese proceso y hasta tanto no pasen a otro plano espiritual la discusión no va a llegar a una profundidad porque hay demasiadas personas que te habla desde la vivencia, no desde la reflexión, el estudio histórico".
Aviso desde el imperio
"Conciudadanos: anoche ordené el despliegue de fuerzas de EEUU en Panamá”, dijo en un discurso a la nación, a las siete de la mañana del 20 de diciembre de 1989, el presidente George H.W. Bush.
"Los objetivos de EEUU han sido salvaguardar las vidas de americanos, defender la democracia en Panamá, combatir el tráfico de drogas y proteger la integridad del Tratado del Canal de Panamá", justificó así el mandatario el cometido de la denominada Operación Causa Justa.
En 1977 se firmaron los tratados Torrijos-Carter que devolvieron la soberanía de Panamá sobre la zona del Canal y que entraron en vigencia en 1979. En 1999 la potencia norteamericana entrega finalmente el control de canal, pero quedó vigente la cláusula que dice que EEUU podrá intervenir militarmente si considera que peligra la seguridad de la vía interoceánica.