Retrato de un artista adolescente, de Cuba, un largometraje documental dirigido por Manuel Herrera, se alzó con tres premios, entre ellos El Mégano, otorgado por la Federación Nacional de Cine Clubes de Cuba; el que otorga el Círculo de la Cultura de la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), y el de la Facultad de los Medios de Comunicación Audiovisual de la Universidad de las Artes de Cuba.
Otra de las películas que más premios colaterales alcanzaron fue La llorona, una coproducción Guatemala-Francia, dirigida por el realizador guatemalteco Jairo Bustamante, que mereció el premio Glauber Rocha, que otorga la prensa extranjera acreditada en Cuba, y el galardón ¡Súmate! Cultural, entregado por la Campaña ¡SÚMATE!, Por una vida sin violencia en Cuba, una iniciativa de un grupo de organizaciones sociales y culturales de la Isla.
Desde una manera fantástica y con toques del cine de terror, La Llorona aborda heridas vivas en la sociedad guatemalteca, a partir de una leyenda popular.
Por su parte, al largometraje de ficción Perro bomba, del director chileno Juan Cáceres, fue merecedor del lauro que otorgó la Casa de las Américas, junto el premio Roque Dalton, que entregó la emisora Radio Habana Cuba.
Este filme, una coproducción franco-chilena, narra la historia de un emigrante haitiano que sufre las consecuencias y la marginación de una sociedad diferente a la suya.
Otros filmes reconocidos en la entrega de premios colaterales fueron Buscando a Casal y La espuma de los días (Cuba), Bacurau y La vida invisible (Brasil), El corral y Litigante (Colombia), Que sea ley (Argentina), Canción sin nombre (Perú), y Mano de obra (México).
El plato fuerte del 41 Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana -los premios Corales en diferentes categorías- serán entregados el próximo domingo, durante la clausura de la fiesta anual cinematográfica.