La Cámara Federal de Casación Penal exigió "profundizar la investigación", informaron fuentes judiciales a las que accedió esta agencia.
El tribunal también aceptó la decisión de una corte de segunda instancia, la Cámara Federal de Apelaciones de Comodoro Rivadavia, que revocó el sobreseimiento dictado en primera instancia en favor del único gendarme imputado, Emmanuel Echazú.
Medidas de prueba
Para continuar con la investigación del caso, los camaristas Gustavo Hornos, Javier Carbajo y Mariano Borinsky exigieron que se amplíen los estudios periciales para determinar el momento de la muerte de Maldonado.
La Cámara exigió que se realicen nuevas declaraciones testimoniales para aclarar la presencia y cantidad de las algas unicelulares eucariotas que se encontraron en el cuerpo de la víctima y el polen que se localizó en sus prendas.
También habrá que determinar el tiempo que permanecieron bajo el agua tanto un bastón metálico retráctil como los billetes hallados entre las pertenencias del joven.
El máximo tribunal penal del país exigió además una reconstrucción virtual del escenario de los hechos en tres dimensiones, con realidad aumentada, y reeditar la declaración testimonial de uno de los testigos ofrecidos por una de las querellas.
Dos de los jueces, Carbajo y Borinsky, advirtieron que de momento no pueden progresar los recursos de casación interpuestos por las partes hasta que no se resuelvan las medidas de prueba.
Maldonado, un tatuador de 28 años oriundo de la provincia de Buenos Aires, fue visto por última vez el 1 de agosto de 2017 durante un violento desalojo de la Gendarmería de una protesta de la comunidad indígena mapuche Lof en Resistencia, en tierras del grupo Benetton situadas en Chubut que son reclamadas como propias por los pobladores originarios.
La desaparición del joven generó gran conmoción pública en todo el país y fue uno de los asuntos álgidos de las elecciones legislativas que se celebraron ese año, con acusaciones de que había sido asesinado y que agentes del Estado ocultaron su cuerpo, lo que suponía un crimen de desaparición forzada.
La autopsia, de la que participaron 55 peritos, concluyó que Maldonado "falleció por ahogamiento en las aguas del río Chubut, coadyuvado por hipotermia".
El caso, en un país en el que la desaparición forzada fue una política de Estado de la última dictadura militar (1976-1983), se convirtió en una de las situaciones más controvertidas de la gestión del Gobierno del expresidente Mauricio Macri (2015-2019).