Mercosur: en una impasse y sin definir una "matriz de intereses comunes" para su perfil productivo
La cumbre del Mercosur celebrada en la ciudad de Bento Gonçalves, al sur de Brasil, se destacó por ser la última para el presidente saliente de Argentina, Mauricio Macri, y para el gobierno de Uruguay, también de salida, que envió a su vicepresidenta Lucía Topolansky. También fue evidente que los tiempos convulsionados que vive la región no permitieron definiciones de fondo. El mandatario anfitrión, Jair Bolsonaro, y el propio Macri respaldaron al gobierno de facto de Bolivia, mientras que Uruguay pidió evaluar si no corresponde aplicarle la "carta democrática" por la ruptura del orden institucional y separarla del Mercosur. En el plano comercial, apenas hubo novedades.
"La cumbre ha tenido un resultado pobre en relación con las expectativas que se habían abierto, como el cambio de estatus de la unión aduanera o la rebaja del arancel externo común. No tenía oportunidad de encaminarse en este momento".
"Estamos frente a cambios de gobierno en Argentina y Uruguay, quiebre institucional en Bolivia y crisis social en Chile (estos dos últimos son socios externos del bloque). Había poco espacio para avanzar en una negociación seria en materia económica", señaló el economista Fernando Porta, profesor de las universidades argentinas de Buenos Aires y de Quilmes y director del CIECTI.
El economista compartió algunas impresiones sobre el futuro del acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea.
"La negociación entre las partes tiene muchos años. Pero este acuerdo, que tampoco es conocido en su letra chica, es incompartible con la idea de mantener un arancel externo común, ya que implicaría una apertura significativa del Mercosur".
Y sobre el próximo gobierno argentino, dijo que si bien apuntará a subir exportaciones por su necesidad de divisas, "eso es difícil en un mundo proteccionista y con guerras comerciales. Más bien deberá ver cómo administra el comercio, ahorra sustituyendo importaciones y genera empleo productivo"
Colombia: "Hay un debilitamiento del uribismo"
Por su parte, el politólogo Álvaro Villarraga dialogó con 'Voces del Mundo' sobre el movimiento de protestas en Colombia, que este jueves cumplió dos semanas, y los efectos en la gestión del presidente Iván Duque.
"Hay un debilitamiento de la extrema derecha, del uribismo, del Centro Democrático, el partido del presidente, aliado con el Partido Conservador y algunos partidos cristianos. Hace dos meses perdieron las elecciones regionales y la mayoría en el Congreso, por lo que a partir de 2020 cambiará el mapa político colombiano, con sectores de centro y de izquierda gobernando varios territorios, incluso las principales ciudades".
"La desaprobación de Duque ya llegó al 70 por ciento y para Villarraga la tendencia es que crezca. Ahora está en el 22 por ciento de aprobación", dijo.
El equipo de 'Voces del Mundo' está integrado por Telma Luzzani, Néstor Restivo, Mercedes López San Miguel, Franco Luzzani y Patricio Porta.