La ciudadanía británica parece dispuesta a fijar el cordón sanitario del Reino Unido que busca imponer Johnson y que mataría de un tiro a dos referéndums recargados: el de desactivar el Brexit por un lado, y por el otro, el de la independencia de Escocia.
En este contexto, Reino Unido "se enfrenta a la posibilidad de que Boris Johnson consiga una mayoría absoluta", afirma Sergio Fernández Riquelme, historiador y Dr. en Sociología y Política Social.
El también profesor titular de la Universidad de Murcia observa que si se cumplen los pronósticos el partido de Boris Johnson tenga la posibilidad de "por fin cerrar el círculo abierto hace años en el cual la población decidió por mayoría absoluta, romper con la Unión Europea".
"Parece que esta Navidad los británicos pueden tener como regalo —para unos deseado, y para otros bastante indeseado— que el Reino Unido al final alcance ese acuerdo y salga de la UE de una vez", vislumbra el experto.
Envite escocés
El Partido Nacional Escocés [SNP], que al momento de la disolución del Parlamento contaba con la no despreciable suma de 35 asientos, ha descartado cualquier tipo de coalición formal que signifique ungir a Johnson como premier.
Fernández Riquelme avisa que Escocia puede convertirse en rehén de la situación. "Van a ver cómo su apoyo directo a Jeremy Corbyn se traduce en votos para los conservadores. Es decir, el miedo a una secesión unilateral o a otro referéndum de la parte norte de las islas británicas de Escocia puede hacer que mucha población transversal, más allá de las ideologías, que considera que es importante mantener la unidad del Reino Unido, al final vote por un señor como Boris Johnson".
Frontera terrestre
Entre 650 comunes, los 10 que ostentaba el Partido Unionista Democrático [DUP], a simple vista tienen gusto a poco. Pero cuando cada voto cuenta para remar hasta los 326 necesarios, podrían antojarse providenciales para Johnson.
"Al igual que en Escocia, las tensiones secesionistas van a ir en aumento, aunque en este caso [de Irlanda del Norte] sí hay una posibilidad real de secesión en el caso de que la frontera […] que ya no existía, que unía comercial, económica y socialmente a ambas regiones" se cierre, subraya el Dr. Sergio Fernández Riquelme.