"El país sabe de que si no hay ninguna necesidad de que el ejército esté en la calle, no va a estar […] Es por extrema necesidad que el ejército ha salido a la calle", manifestó Áñez al intervenir en una reunión de representantes del Gobierno de facto con sectores sociales.
Cuando no haya vandalismo en la calle, agregó, ni "barricadas en cada esquina", no habrá necesidad de que el ejército esté en la calle.
La presidenta interina, cuyo discurso fue transmitido por el canal Bolivia TV, calificó de "verdadero despropósito que se quiera dar a entender a la población que el ejército sale por capricho".
"Nosotros no actuamos por capricho, actuamos por una tremenda necesidad", enfatizó.
También el titular de Defensa, Fernando López, admitió que el decreto "evidentemente tiene que tener un fin, es decir, tiene que terminar en un momento".
"Y el momento es cuando certifiquemos el 100% de pacificación en el país", añadió.
El Gobierno de facto expidió el pasado 15 de noviembre el Decreto Supremo 4078 autorizando la participación de las Fuerzas Armadas en tareas de control y restauración del orden público, liberando a los militares de eventuales responsabilidades penales.
Cifras de la Defensoría del Pueblo indican que 32 personas han muerto en Bolivia en las protestas de las últimas semanas.
Evo Morales, exdirigente aymara de los sindicatos cocaleros, renunció el 10 de noviembre a la presidencia en medio de violentas protestas y tras la petición expresa por parte de la policía y las Fuerzas Armadas luego de un informe de la OEA que muestra irregularidades en la elección del 20 de octubre.
Tras la partida de Morales hacia el exilio en México, que le otorgó asilo, la senadora Áñez se autoproclamó presidenta sin pasar por los procedimientos legislativos previstos en unas sesiones del parlamento que no tenían el quórum requerido.
La investidura de facto de Áñez fue avalada por el Tribunal Constitucional.
EL 23 de noviembre el Senado de Bolivia aprobó una ley para convocar nuevos comicios.
En las elecciones podrán participar todos los partidos registrados legalmente, con los candidatos que deseen, excepto Morales y su vicepresidente Álvaro García Linera.