En 1997, Putin fue nombrado vicepresidente de la Administración presidencial.
"Aproximadamente un año después, llegó al departamento de control y dijo que quería irse", comentó Yumáshev en una entrevista con el periodista ruso-estadounidense Vladímir Pozner en el Centro Yeltsin de Ekaterimburgo.
Según el entonces jefe de la Administración presidencial, Putin señaló el horario estricto y el no tener días libres ni tiempo para la familia como los motivos de su decisión.
Sin embargo, justo uno o dos meses después, el primer vicepresidente de Yumáshev renunció.
"Y con gusto le ofrecí este puesto a Vladímir Putin, y lo aceptó", explicó Yumáshev.
Ese puesto incluía viajes más frecuentes por el país y reuniones con el entonces presidente Borís Yeltsin, quien elegiría más tarde a Putin como su sucesor.
¿Por qué Putin?
"Para Yeltsin era importante que Putin fuera una persona de otra generación: no se podía dejar el país a los mismos que estaban en la URSS", señaló Yumáshev.

El político añadió que el carácter del sucesor era importante para Yeltsin, y en Putin vio a un hombre firme capaz de tomar decisiones correctas.
"Él [Primakov] intentó dos veces despedir a Putin del puesto de director del FSB (Servicio Federal de Seguridad de Rusia). Poca gente lo sabe", reveló Yumáshev.
Sin embargo, Yeltsin no permitió que Primakov lo hiciera, agregó sin revelar más detalles.
Según el político, Yeltsin consideró a Primakov como demasiado autoritario y de estilo soviético para convertirse en el nuevo líder de la nación.

Finalmente, Primakov se retiró de la carrera presidencial y más tarde se convirtió en aliado y consejero de Putin. El diplomático murió en 2015, a la edad de 85 años.