Concluyen los bloqueos en La Paz y El Alto

"El despacho de combustibles es masivo y sin interrupción desde la madrugada, en pocas horas todos los surtidores están vendiendo sin restricciones", dijo a reporteros el viceministro de Seguridad Ciudadana, Wilson Santamaría, en la planta de combustibles de Senkata, en El Alto, que abastece a esa ciudad y La Paz.

En ambos casos, las medidas de protesta contra la presidenta de facto Jeanine Áñez fueron suspendidas temporalmente con la condición de que se convoque a corto plazo a nuevas elecciones nacionales.

Algunos medios informaron, sin embargo, que sindicatos campesinos leales al presidente depuesto Evo Morales mantenían protestas contra el reciente cambio de Gobierno, con bloqueos de carreteras en la región productora de coca de Chapare (centro) y en provincias agrícolas del departamento de Santa Cruz (este).

El fin de ese bloqueo, que afectaba también a la carretera entre La Paz y la ciudad altiplánica de Oruro, se produjo luego de que se confirmara para este 23 de noviembre una reunión de la presidenta de facto Jeanine Áñez con organizaciones sindicales, campesinas y vecinales de todo el país para firmar un pacto de pacificación.

El presidente de la petrolera estatal YPFB, José Luis Rivero, dijo en un comunicado que en los depósitos de Senkata había cantidades suficientes de gasolinas, diésel y gas licuado de petróleo para normalizar de inmediato los mercados de La Paz, El Alto y provincias cercanas.

​La aguda escasez de combustibles en la última semana había paralizado casi completamente al transporte urbano y servicios como la recogida de basura en ambas ciudades, que permanecieron comunicadas solo por la red de teleféricos.

En La Paz también fueron retiradas casi todas las barricadas que vecinos habían levantado, especialmente en barrios residenciales, en prevención de ataques vandálicos.