Este español con origen en Cataluña fue condenado a la pena máxima tras ser declarado culpable de los delitos de asesinato premeditado, encubrimiento de un cuerpo, secuestro y robo, según publicó el diario tailandés Bangkok Post.
El alto tribunal del país asiático determinó que en enero de 2016 Segarra, de 40 años de edad, llevó a su compañero de negocios, Bernat, de 41 años, a una habitación que el catalán alquilaba en la capital tailandesa, donde tras retenerlo durante una semana lo asesinó, congeló y desmembró.
Este 20 de noviembre, el Tribunal dictó sentencia firme para el español, que permanecía internado en la prisión central de Bang Kwang, basándose en pruebas circunstanciales así como grabaciones de cámaras de seguridad y las declaraciones de algunos testigos.
También tuvo en cuenta las pruebas de ADN realizadas sobre los restos hallados en el río, así como los exámenes efectuados con restos de sangre que las autoridades policiales encontraron en el congelador de la vivienda de Segarra.
Durante años, este español negó los cargos de los que se le acusó y llegó a huir a Camboya, aunque fue arrestado y llevado de nuevo a Tailandia, donde permaneció en prisión desde 2016.
Además de la pena de muerte, Segarra deberá devolver a la familia de su víctima el dinero que le robó de la tarjeta de crédito.