Según informaron los Mossos d'Esquadra en un comunicado, el pasado 26 de octubre confiscaron un contenedor marítimo que intentaba introducir en España hasta 489 paquetes de cocaína de gran pureza.
El operativo se activó tras saber por una investigación policial que un cargamento procedente del puerto del Callao (Perú) descargaría en Barcelona una gran cantidad de droga camuflada como un cargamento de 20 toneladas de aceite de pescado.
A su llegada a territorio español, los Mossos localizaron el contenedor en cuestión y en su interior hallaron varios cientos de kilogramos de cocaína repartidos en 16 bolsas de deporte.
El objetivo era extraer la cocaína durante las primeras horas de su llegada a Barcelona para evitar el control de las autoridades aduaneras.
Las autoridades judiciales mantienen una investigación abierta para determinar a los responsables de este delito de tráfico de drogas.