"Si pudiéramos, si estuviéramos ya en las condiciones, a partir de mañana [el 15 de noviembre] mismo comenzamos a hablar del nuevo proceso electoral, si no nos da el Movimiento Al Socialismo (MAS, de Morales) las condiciones tengan la seguridad de que vamos a optar otros caminos", dijo Áñez a la prensa.
"Vamos a hacer la valoración, vamos a buscar los mecanismos que sean pertinentes, acudiremos nuevamente a que el Tribunal Constitucional se pueda pronunciar", dijo la autoproclamada presidenta interina horas después de que el MAS retomara el control de la Cámara de Diputados antes de intentar lo mismo en el Senado.
La Constitución da a la presidenta interina plazo de 90 días para organizar elecciones, que deben ser convocadas mediante una ley sancionada por el parlamento, lo que solo es posible con los votos del MAS.
Añadió que el mismo procedimiento podría ser utilizado para modificar las leyes electorales y designar un nuevo Tribunal Supremo Electoral.
Áñez era segunda vicepresidenta opositora del Senado cuando tomó el poder el 12 de noviembre con aval del Tribunal Constitucional y los mandos militares y policiales.
En ese mismo palacio, la bancada del MAS reorganizó en la madrugada de este 14 de noviembre la directiva de la Cámara de Diputados, designando como presidente a Sergio Choque, y alistaba una sesión en el Senado, donde se preveía que confirme como presidenta a su líder parlamentaria Adriana Salvatierra, cuya renuncia anunciada el 10 de noviembre aún no fue considerada oficialmente.
"Este es un Gobierno de transición, no me voy a cansar de insistir a la población, buscamos la paz en el país, qué lástima que la gente del MAS no se una al pedido de la población", dijo Áñez.
Este 14 de noviembre la presidenta interina también enfrentaba persistentes bloqueos de carreteras y manifestaciones de sectores campesinos, indígenas y vecinales que rechazan el cambio de Gobierno y han encontrado en antiguas declaraciones discriminadoras de la presidenta un motivo adicional de protesta.