"Me dice que él (Mauricio Macri) necesitaba el canal para ir por Cristina, le digo qué es ir por Cristina, y me dice hay que meterla presa, a lo que yo le contesto no contés conmigo", señaló el empresario en su declaración testimonial ante la jueza federal María Servini.
Como dueño del Grupo Indalo, que abarca más de 170 empresas, incluidas medios de comunicación, López declaró en calidad de testigo ante Servini en el marco de una denuncia que presentó su socio Fabián de Sousa contra funcionarios del actual Gobierno.
El ejecutivo, que estuvo en prisión preventiva durante casi dos años, dijo que luego de la conversación se sintió "muy nervioso" y alterado.
"Él no se mostró molesto ni nada, todo lo que me dijo fue con naturalidad, como si hubiésemos hablado de arreglar una cena y la verdad que a partir de ahí no sé qué hablamos, no lo recuerdo", declaró el empresario.
En un momento de la conversación, Macri dio a entender que la expresidenta era quien controlaba el canal de televisión, según señaló López durante su declaración testimonial ante la jueza Servini.
"No soy testaferro de nadie, todo lo que tengo es mío y el canal es 70% mío y 30% de Fabián De Sousa, así que ese cuento que anda por la calle diciendo que el canal es de Cristina, sacátelo de la cabeza porque no es cierto", respondió López.
Guerra
El empresario dijo también que un operador del actual Gobierno, Fabián Rodríguez Simón, conocido como Pepín, les advirtió que iba a empezar "la guerra".
El empresario, cuyo grupo creció exponencialmente durante los Gobiernos de Néstor Kirchner (2003-2007) y Cristina Fernández (2007-2015), generó con los años un endeudamiento con la Administración Federal de Ingresos Públicos.
De este modo, "Macri nos tiró el Estado encima", sentenció López.
Fue "una guerra despareja porque eramos dos perejiles (tontos) contra el Estado completo, era como ir a la guerra con EEUU con dos escarbadientes", añadió.
Un tribunal de segunda instancia, la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional, ordenó liberar el pasado 4 de octubre a López y De Sousa en el marco de dos causas derivadas de un caso que investiga el supuesto pago de coimas durante el Gobierno anterior.
Ambos se encontraban detenidos desde diciembre de 2017.