La exprisionera, graduada en relaciones internacionales en una universidad estadounidense, cumplió una condena de 18 meses en una prisión solitaria en Estados Unidos.
Bútina señaló en una entrevista con Sputnik que estudiaría tomar medidas legales para proteger su reputación y defender los derechos de los prisioneros.
Butina reconoció que durante su estancia en EEUU "vivía con la ilusión" de que EEUU sea un Estado de Derecho.
María Bútina, detenida en EEUU desde julio del año pasado, se declaró culpable de conspirar para actuar como agente extranjera no registrada, y fue condenada a 18 meses de prisión.
Sin embargo, el presidente ruso, Vladímir Putin, afirmó que la acusación contra la mujer era injustificada, ya que la misma no cumplía ninguna misión de Moscú.