Según el sondeo de opinión pública de la empresa Cifra —una de las más respetadas en el medio local— dado a conocer el lunes 21 de noche, el candidato del FA, Daniel Martínez, lidera con 38%. Lo siguen Luis Lacalle del Partido Nacional (PN) con 27%, Ernesto Talvi del Partido Colorado (PC) con 11%, y Guido Manini Ríos de Cabildo Abierto (CA) con 10%.
"Hay dos actores peleando por el tercer lugar, que son el histórico PC y CA, que es un nuevo partido del recientemente destituido general Guido Manini Ríos, el actor más novedoso por ser un partido que hace un año no existía y que puede disputar el tercer puesto. Sería histórico", apuntó en diálogo con Sputnik Ernesto Pampín.
Sería histórico también por el pasado reciente del candidato, que en marzo fue cesado en sus funciones por el presidente, Tabaré Vázquez, en un caso que involucra el ocultamiento de información sobre el destino de un detenido desaparecido durante la dictadura militar (1973-1985).
Sus posiciones ideológicas antiinmigrantes, entre otras, le han valido el mote de encarnar al "Bolsonaro Oriental" y condenas políticas. A tal punto que el candidato colorado, Talvi, dijo que no integraría una alianza con él para vencer al FA. "Es un partido que despierta rispideces a la hora del armado de la coalición", resumió Pampín, licenciado en Ciencia Política y magíster en Comunicación Política por la Universidad Católica del Uruguay.
La estrategia de la oposición, particularmente del candidato Lacalle que encabeza la disidencia, es convocar a los líderes de los demás partidos a sumar esfuerzos y poner fin a los Gobiernos progresistas del FA, que se mantiene en el poder desde 2005.
Parlamento fragmentado
"Es improbable que el FA alcance una mayoría parlamentaria, pero su fortaleza o debilidad respecto a la segunda vuelta también se va dar según la votación de los distintos partidos de oposición y hasta qué nivel logren acordar una coalición preelectoral y con qué fuerza", describió Pampín uno de los escenarios más posibles este 27 de octubre.
Lacalle, Talvi y el propio Manini se muestran favorables a una alianza electoral que sea base para un gobierno de coalición. Pero lo cierto es que hasta tanto las urnas no digan qué apoyo tendrán, ninguno aporta detalles sobre las características y los lugares que ocuparían.
Aquí entran en juego otras seis propuestas electorales, que en las encuestas marcan entre 0,5 y 2 puntos porcentuales, y que llegado el caso podrían ser clave.
"En la elección pasada accedieron 5 partidos al Parlamento y hay quienes prevén que pueden acceder hasta 8 en esta oportunidad. No creo que necesariamente sea un desafío para la gobernabilidad que haya 8 partidos en el Parlamento", opinó Pampín.
El barrio convulsionado
Las elecciones en Uruguay coinciden este domingo con las nacionales en Argentina, las municipales en Colombia y se producen una semana después de las registradas en Bolivia, con el triunfo de Evo Morales.
La disputa entre gobiernos progresistas y neoliberales por mantener o recuperar el poder se da también en tiempos de estallidos sociales en la región. Ocurre en países regidos por proyectos de derecha como Perú, Ecuador y Chile, cuyos presidentes han denunciado que las protestas están fomentadas y financiadas por Venezuela y su presidente, Nicolás Maduro.
"Creo en general que no incidirá mucho, son impactos muy menores", dijo Pampín sobre cómo impactarán en el ánimo del electorado uruguayo las realidades políticas y sociales que se vivieron en los últimos días en la región.