La operación logró dos objetivos, la "reducción en la deuda total de Pemex por 5.000 millones de dólares, con los recursos de la aportación patrimonial del Gobierno federal, y en segundo lugar, "el refinanciamiento de pasivos por un monto de 20.130 millones de dólares", dice un comunicado de la empresa.
La operación de manejo de pasivos estuvo integrada por tres componentes, relacionados con una colocación de bonos, una recompra y un intercambio de bonos en dólares.
El segundo componente de la transacción consistió en la "recompra e intercambio de bonos denominados en dólares que vencían entre 2020 y 2025 por un monto de 8.743 millones de dólares" a cambio de papeles de largo plazo.
El tercer elemento de la operación fue "un intercambio de bonos en dólares con vencimiento entre 2041 y 2048 por un monto de aproximado 3.887 millones de dólares".
Pemex es la petrolera más endeudada del mundo, con una deuda financiera antes de esta operación de 104.000 millones de dólares, según informes oficiales presentados en el segundo trimestre de 2019.
El marco de la operación
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público, que encabeza Arturo Herrera, felicitó a Pemex "por la exitosa operación de manejo de pasivos lo que le ha permitido reducir su deuda, aumentar su liquidez y fortalecer su solidez financiera".
"Ese monto representa casi la mitad de la deuda de Pemex, lo que convierte a esta transacción en la de mayor demanda en la historia de la empresa", explicó la Secretaría de Hacienda.
Los bonos de mayor plazo fueron los más demandados en el mercado.
Ese hecho "demuestra la confianza de los inversionistas en la fortaleza de Pemex a largo plazo", añadió Hacienda.
Gracias a esta transacción, la empresa redujo su riesgo de refinanciamiento para los próximos años.
Asimismo, con el fin de mitigar el costo financiero de la operación se intercambiaron bonos de largo plazo.
"A la fecha se observa una mejoría en el sentimiento de riesgo del mercado hacia Pemex con respecto al inicio del mes de septiembre", celebra la compañía estatal, la más grande de este país.
Como resultado Pemex ha logrado una reducción en 41 puntos base de los llamados "credit default swaps" (permutas de cobertura por incumplimiento crediticio) a cinco años.