"Yo diferenciaría lo que es la discriminación de la xenofobia, creo que (lo que pasa en Perú) no es xenofobia (...) La xenofobia es un estadío más amplio que implica no querer tener contacto alguno con los extranjeros y me parece que no estamos en ese estadío", afirma Agusti.
Para el último estudio estadístico, realizado por ACNUR sobre la situación de los migrantes venezolanos en Perú, se entrevistó a 2.928 personas en cinco ciudades: Lima (centro), Tumbes (norte, frontera con Ecuador), Tacna (sur, frontera con Chile), Arequipa y Cusco (ambas en el sur).
Sobre este porcentaje, Agusti puntualiza que "esto no significa que las situaciones de discriminación se tengan todos los días y a cada momento", sino que en muchos casos puede tratarse de hechos aislados.
El 54% de los inmigrantes afirma tener una relación "buena" con la comunidad peruana, mientras un 37% califica su relación como "regular", un 7% como "muy buena" y apenas un 2% como "mala".
Por otro lado, existe una percepción mayoritariamente positiva en cuanto a la sensación de seguridad en la comunidad migrante.
Agusti apunta a que la labor de prevención es de vital importancia para evitar que los prejuicios negativos se instalen dentro de la comunidad de acogida, así como intentar que hechos negativos y aislados, en particular los cometidos por delincuentes extranjeros, se hagan extensivos a toda la comunidad venezolana.
Los esfuerzos de parte de ACNUR para las labores de prevención contra situaciones negativas, así como de integración y entendimiento entre peruanos y venezolanos, son varias.
"En ACNUR tenemos una gran campaña marco que se llama Mi Causa es tu Causa (en jerga peruana, "causa" es sinónimo de "amigo"), en esta se realiza ferias donde se busca la integración de la comunidad peruana con la que llega con distintas actividades", señala Agusti.
En esta campaña se trabaja con brigadas de voluntarios venezolanos y también peruanos donde se plantean acciones como pintar una escuela, arreglar un parque o limpiar los residuos de las playas, contó.
Asimismo, ACNUR busca trabajar en una campaña denominada "No Generalices", a fin de evitar que los actos negativos y aislados de inmigrantes venezolanos no estigmaticen a toda la comunidad.
La prevención contra la instalación de una situación xenófoba es necesaria si se considera que un 38% de los inmigrantes afirma que su intención es quedarse en Perú, mientras 18,8 desea residir aunque buscando una ciudad distinta y solo un 15,7% manifiesta voluntad de regresar a Venezuela.
Actualmente, según cifras dadas por el Ejecutivo, el número de venezolanos residentes en el país ascendería a cerca de 900.000 personas.