La estatal Agencia Nacional del Petróleo (ANP) informó en un comunicado que se recaudaron "8.900 millones de reales [2.160 millones de dólares] en bonus de firma [el valor que se paga al firmar el contrato de concesión], valor récord entre las rondas en el régimen de concesión realizadas en Brasil".
La empresa estatal Petrobras tan solo se presentó para explotar dos pozos, y acabó ganando uno (en un consorcio junto a la británica BP Energy), el C-M-477, en la cuenca de Campos, frente a la costa de Sao Paulo (sureste).
El director general de la ANP, Décio Oddone, resaltó la importancia de las inversiones que se generarán a partir de ahora.
"Estimamos de tres a cuatro nuevas plataformas en el litoral de los estados de Río de Janeiro y Sao Paulo [sureste], una producción de 400 a 500.000 barriles por día y una recaudación del orden de 100.000 millones de reales [24.300 millones de dólares] en tributos y participaciones gubernamentales a lo largo de la vida de los proyectos", afirmó.
Finalmente, ninguna empresa optó por esos bloques (cuya adjudicación está siendo contestada en la Justicia), ni por ninguno de los situados en la región noreste del país.
