Este Día Nacional fue establecido en 2016, para recordar a los "368 refugiados y migrantes que perecieron en el trágico naufragio de Lampedusa el 3 de octubre de 2013, y a todos aquellos que perdieron la vida en un intento desesperado de encontrar seguridad y protección en Europa", informa el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en su página web oficial.
Aunque en los últimos años el número de los migrantes que cruzan el Mediterráneo, disminuyó, "crece la proporción de las personas que mueren durante el viaje, en relación a las que los que llegan a Italia", afirma el ACNUR.
En los seis años que pasaron desde la tragedia del 3 de octubre de 2013, unas 19.000 personas perdieron la vida en las aguas del Mediterráneo.