"La estrategia de (el postulante opositor Luis) Lacalle Pou se basó en no dar propuestas sino criticar al Gobierno (...) por el otro lado, (el candidato oficialista Daniel) Martínez tuvo que rendir cuentas de lo que hizo el Gobierno, proponer proyectos e intentar responder a las críticas (...) claramente el debate se centró en la pelea entre la alternancia y volver al pasado", dijo a Sputnik la politóloga y docente de la Universidad de la República, Alexandra Lizbona.
El del 1 de octubre fue el primer debate de dos aspirantes presidenciales desde 1994.
Los candidatos con más chances de suceder al actual mandatario Tabaré Vázquez, según las encuestas, son Martínez, del gobernante Frente Amplio (izquierda) y Luis Lacalle Pou, del opositor Partido Nacional (centroderecha).
Martínez tiene una intención de voto que oscila entre 30 y 40%, mientras que el respaldo a Lacalle es de entre 22 y 30%, según diversos sondeos.
Sin embargo, las encuestas muestran también que la intención de voto a las fuerzas opositoras supera la del Frente Amplio, por lo que en una eventual segunda vuelta el candidato opositor podría alzarse con la victoria.
Discusión entre partidos
El diputado del Partido Nacional, Pablo Abdala, dijo a Sputnik que el debate fue una instancia "muy provechosa" debido a que los candidatos pudieron presentar los temas que más les preocupan, lo que implica un insumo que la opinión pública podrá utilizar al votar.
Abdala quedó "muy satisfecho" con el desempeño de Lacalle Pou y consideró que el líder del Partido Nacional fue el que ganó el debate, por su "claridad de pensamiento", seguridad y las "críticas fundamentadas" que realizó contra el Gobierno.
"Por otro lado, el candidato del oficialismo apareció muy vacilante, dubitativo, dado que la herencia de este Gobierno le pesaba mucho (...) en realidad, ayer hubo propuestas de los dos lados. Que haya habido muchas críticas de parte del candidato opositor no quiere decir que no haya propuestas", agregó.
Por su parte, la senadora del Frente Amplio, Mónica Xavier, aseveró, en diálogo con Sputnik, que es positivo que instancias como el debate se impulsen en las campañas electorales.
Consideró que la actitud confrontativa de Lacalle lo único que hizo fue convencer a sus votantes, mientras Martínez consiguió captar algunos votos indecisos.
Lizbona dijo que el debate resultó ser mucho más difícil para Martínez, ya que él tuvo que rendir cuentas de lo que hizo el Gobierno, generar propuestas y responder a las críticas en los mismos minutos que Lacalle Pou.
En cambio, Lacalle Pou se centró en criticar al Frente Amplio, desconociendo lo que pasó antes del 2004, explicó.
"Esto es muy importante; Lacalle no quiso que la gente supiera su opinión de lo que pasó en el 2004. Él no dijo absolutamente ningún logro del Gobierno del Partido Nacional en los 90, su estrategia fue ocultar todo lo que pasó antes del Frente Amplio", agregó.
La estrategia de Lacalle Pou fue intentar que el electorado crea que el Frente Amplio hizo las cosas mal, por lo que pidió la confianza de la ciudadanía, dijo.
"Por un lado, tenemos un Martínez que fue a defender logros que son irrefutables, que tienen que ver con la mejora del salario, el crecimiento y la disminución de la pobreza; por el otro lado, se observó un Lacalle sin propuestas", agregó.
Lo único que anticipó Lacalle Pou es una política de ahorro, que en Uruguay siempre ha estado vinculada a un ajuste, disminución del salario real y un achicamiento del estado, según Lizbona.
Incidencia
A nivel de la ciencia política nunca está claro cómo terminan favoreciendo los debates, dijo Lizbona.
"Por un lado para mí es un debate que termina dando un salto positivo a ambos respecto a lo que son sus militantes de base; se veía en las redes sociales que los militantes del Frente Amplio como los de Lacalle permanentemente salían a defender las propuestas. Esto generó una confirmación en la militancia", agregó.
"En ciencia política hablamos mucho de los costos de información, que son muy altos, los votantes por lo general no tienen tiempo ni recursos para leer los programas ni de escuchar tantas entrevistas, por lo que a veces se quedan con pocos titulares", agregó.
El titular que quiso lograr generar Lacalle Pou es que el Frente Amplio no es creíble, explicó Lizbona.
"Muchos decimos que a veces cuando hay votantes que no siguen mucho la política y que no tienen información, el atajo ideológico que hacen es quedarse con esas frases (...) también del otro lado, Martínez quiso decir que el Frente Amplio no son solo palabras, son hechos y certezas, por lo que en el Partido Nacional hay incertidumbre", agregó.
El impacto del debate va a depender de los medios y de cómo los analistas y periodistas lo evalúen, opinó la politóloga.
No obstante, los comicios de octubre se le presentan como los más difíciles de los últimos 15 años, pues reflejan una pérdida de votantes, según las encuestas.
Desde la aprobación de una reforma constitucional de 1996, las normas electorales establecen que, si ningún candidato logra superar el 50% de los votos emitidos en una primera instancia de votación, habrá segunda vuelta entre los dos primeros.
Las elecciones de 2009 y 2014 se definieron en una segunda vuelta en noviembre entre el Partido Nacional y el Frente Amplio.