"Estamos contemplando seriamente cambiarle el nombre al partido, ya tenemos propuestas; aunque el cambio de nombre se decide en asamblea general del partido, la verdad es que sí lo estamos contemplando", dijo Ramírez, última esposa del fundador y líder máximo de la extinta guerrilla FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia), Manuel Marulanda Vélez (1930-2008), "Tirofijo".
El cambio responde a la confusión "y mala imagen" que empieza a generarse por los disidentes que utilizan las mismas siglas, dijo Ramírez.
Esto se agudizó a partir del 29 de agosto, cuando en una "decisión desafortunada", según Ramírez, los excomandantes de FARC Iván Márquez y Jesús Santrich anunciaron que volvían a las armas.
Incluso el gobernante y derechista partido Centro Democrático (CD) habría propuesto, durante una sesión de la Comisión de Paz del Congreso, a congresistas de FARC que se cambiaran el nombre para diferenciarse de los disidentes, según dijo a la prensa el diputado del CD, Gabriel Santos.
La senadora comentó que la decisión de Santrich y Márquez "es como un barco sin rumbo; ¡cómo es posible que se utilicen los incumplimientos del Estado para rearmarse! Eso no tiene un asidero", y recordó que el acuerdo de paz tiene un blindaje internacional que se debe "hacer cumplir con el respaldo del pueblo, y no con el de las armas".
Ramírez ocupa uno de los cinco escaños asignados al partido FARC en el Senado en virtud del acuerdo de paz firmado en noviembre de 2016.